washington. Las fuerzas de seguridad estadounidenses informaron ayer de que se habían registrado varios disparos en las inmediaciones del Pentágono, aunque no se produjeron heridos. Fuerzas locales y federales se desplegaron por la zona para tratar de localizar al autor de los mismos. Los disparos -al menos cinco según los primeros análisis y realizados aparentemente por un rifle- se realizaron poco antes de las 05.00 de la mañana. Las balas impactaron, sin romperlas, contra varias ventanas del tercer y cuarto piso del singular edificio.

El tiroteo duró alrededor de media hora, según la edición digital del diario The Washington Post. El portavoz del Pentágono, coronel Dave Lapan, precisó al rotativo que no se habían registrado heridos.

Las fuerzas de seguridad se desplegaron en las zonas cercanas al Pentágono tratando de hallar pruebas, mientras que el FBI examinaba los impactos de bala, ya que no se encontraron los casquillos. El acceso del Pentágono quedó cerrado durante unos 45 minutos. El portavoz de la seguridad del Pentágono, Terry Sutherland, confirmó que dos de estas balas impactaron en la fachada sur del edificio, una de las cuales golpeó contra una ventana -a prueba de balas- y otra impactó directamente sobre la fachada. Esta zona de las instalaciones se encuentra en obras y, por tanto, está vacía, según la cadena CNN. El coronel Lapan precisó que se desconoce si hay alguna conexión entre este incidente y los agujeros de bala detectados el lunes en las ventanas del Museo Nacional de Marines, en Triangle Virginia, a unos 50 kilómetros al sur del Pentágono. Por su parte, el director de los servicios de protección del Pentágono, Steven E. Calvery, afirmó que el suceso, podría tratarse de un "hecho al azar".