El marisco, protagonista de lujo en el Serantes en Bilbao

DESDE 1960 en la calle Licenciado Poza de Bilbao –su primera ubicación–, Serantes se ha forjado un nombre y un prestigio derivado de la calidad de su marisco y pescado, tan apreciados en las fechas navideñas. Para despedir el año de lujo y dar entrada al próximo al más alto nivel, en sus mesas tienen gran aceptación el percebe, quisquillón, nécora, cigala tronco, la langosta, el bogavante..., siempre frescos. Incluso disponen de vivero propio. Y por encima de todo, las angulas, muy demandadas estos días, como aseguran en sus tres restaurantes, que surcan la Navidad viento en popa.

Mención especial requiere su txangurro al horno, muy solicitado en las comidas y cenas festivas. Igual de selecto es su pescado, preparado a la oriotarra, con su particular toque en el refrito a modo de pil-pil. El besugo y el rey son sus grandes protagonistas, seguidos de la lubina, el rodaballo y las kokotxas.

El género marino traído de puertos como el de Santoña, Pasaia y Armintza deja constancia de todas sus virtudes en el paladar .

Las carnes no les van a la zaga en calidad, según se aprecia en la chuleta de ganado mayor. Y qué decir de guisos tan tradicionales como los caracoles a la vizcaina, el rabo de toro y la carrillera ibérica de bellota, así como la caza menor.

En estas fechas trabajan con menús especiales de Navidad y también preparan para llevar, incluso el 31 de diciembre y 6 de enero.

Todos sus platos encuentran la mejor compañía en una bodega que apuesta por el producto local, poniendo el foco en el txakoli de Bizkaia y Gipuzkoa, junto a los vinos de Rioja Alavesa, amén de cavas y champagnes. Para disfrutar en un ambiente clásico y señorial.