El Arenas sigue de fiesta. El histórico ascenso a Primera RFEF del conjunto rojinegro merece celebrarlo por todo lo alto, pero una vez acaben los reconocimientos toca tomarse unos días libres, cargar pilas y empezar a dar forma al proyecto para competir con garantías en la tercera categoría estatal. Óscar Sampayo, el director deportivo de la entidad arenera, adelanta a DEIA algunos detalles y uno de ellos afecta a la plantilla. Sampayo es contundente al confirmar que “todos los jugadores han terminado con nosotros”, un escenario que quizá sorprenda por el hecho de no tener atado a la guardia pretoriana de un Ibai Gómez con el que se reunirá la próxima semana y del que da por hecho que cumplirá su segundo año de contrato en el banquillo. “La política del Arenas desde tiempo atrás es de año por año y cada uno se gana la renovación o no. Nunca hemos hipotecado al club a tener a jugadores que firmen por dos años, ahora toca sentarme con el entrenador, valorar las posibles renovaciones que pueda haber y esperar el mercado de fichajes”, declara el portugalujo, que, así y todo, espera la continuidad de varios de los futbolistas que han asumido un rol importante.

Sampayo no quiere dar nombres, pese a que en boca de todo el entorno del Arenas asomen futbolistas como Jon Sillero, Alex Ibarrondo, Paúl Álvarez, Eneko Zabaleta, Ander Varona, Urko Collado, Ibon Badiola, Aitor Uzkudun y compañía. Por el contrario, todo parece indicar que los jugadores que menos minutos han tenido –Daiki Niwa, Jon Trincado o Iker Amorrortu, entre otros– no continuarán como rojinegros. “Habrá un bloque importante que estemos interesados en renovar. Todo pasa por una conversación con el entrenador para ver también sus inquietudes, si seguimos en esta línea de futbolistas que teníamos esta temporada o tenemos que aspirar a otro tipo de perfil”, reflexiona el director deportivo del Arenas, que apunta que algunos futbolistas ya han comunicado su deseo de continuar en el club si la dirección deportiva así lo considera. “La idea es continuar con esta línea de aprendizaje que el otro día hablaba el míster. Es un proceso de crecimiento personal para él e institucional para el resto. Entiendo que no va a impedir mucho la planificación y la plantilla la temporada que viene, nos hemos acostumbrado a un tipo de fútbol atractivo y bonito, un fútbol que ha atraído a mucha gente a Gobela cada 15 días y queremos seguir en esa línea”, matiza.

Confeccionar una plantilla competitiva le supondrá al club rojinegro hacer un importante esfuerzo económico que su director deportivo cifra en “más de medio millón de euros”, poco más del doble de la partida destinada esta temporada, 220.000 euros, con una media entre 10.000 y 12.000 euros por jugador. “El presupuesto saldrá adelante y será ajustado como el de esta temporada, por lo que tenemos que acertar muy bien como hemos acertado este año. Hay un salario mínimo en Primera RFEF que está por determinar, pero que rondará entre los 22.000 y 25.000 euros y por eso hay que hilar fino en nuestras decisiones, porque la categoría, de facto profesional, lo exige y a la que ha costado mucho llegar”, concluye Sampayo, que recalca que “vamos a priorizar el mercado vasco, pero no cerramos puertas a otros mercados”.