Gernika - El Gernika, que empezó a entrenar el 17 de julio, se presentó ayer en Urbieta con un bloque que mantiene catorce futbolistas de la temporada pasada, en la que necesitó mejores números de los habituales para sellar la salvación en Segunda División B, donde vivirá su tercera campaña consecutiva. Concretamente, finalizó duodécimo con 49 puntos en su casillero, con dos puntos de ventaja sobre la zona de promoción y tres respecto al descenso directo. “Si equipos potentes dicen que van a ir partido a partido, qué vamos a decir nosotros, que somos de los más humildes de la categoría. La idea es buscar la permanencia, pero el campo pondrá a cada uno en su sitio”, apuntó Jabi Luaces, que afronta su séptimo curso como técnico del primer equipo, el quinto de forma seguida.

Contará con la ayuda del exrojiblanco Endika Bordas, que tras colgar las botas se une como segundo. Completan el cuerpo técnico Eneko Irastorza e Ibon Telletxea en la preparación física; Ander Malaxetxebarria, en la de porteros; y Asier Basabe, fisioterapeuta. Patxo Luaces, delegado; Iñigo Otazua, encargado del material; y Gotzon Lauzirika, médico; también aportan su granito de arena. A sus órdenes continúan los porteros Jon Altamira y Asier Iruskieta, los laterales Kevin Calle y Ander Larruzea, los centrales Jon Carracedo y Koldo Berasaluze, los mediocentros Lander Torrealdai y Xabier Otiñano, los mediapuntas Gorka Larruzea y Mikel Abaroa, los extremos Ibon Entziondo y Jon Madrazo y los delanteros Imanol Etxabe e Iñigo Pradera.

A ellos se suman nuevas incorporaciones para todas las líneas. Para la meta llega Diego Carrio, formado en el Alavés. También se incorporan jóvenes desde Lezama: Aitor Arego y Mikel Murgoitio para la zaga y Lander Olaetxea a la zona de creación. Desde el Ebro aragonés se unen el ariete Txema Pan, que militó hace varios cursos en el Amorebieta, y el extremo Alain Barrón, que también defendió el escudo zornotzarra y el del Sestao River. Además, se encuentran a prueba el ex del Basconia Alex Valiño y los canteranos Borja Altamira y Kerman Arriaga. “Estoy contento con el equipo que vamos haciendo, pero todavía queremos cerrar alguna llegada más”, reconoció Luaces, que ya ha sufrido el primer contratiempo importante en su planificación. Y es que uno de los nuevos fichajes, Pan, se ha lesionado la rodilla y podría estar seis meses de baja, lo que sin duda supone un duro golpe para los planes de la escuadra vizcaina.

Tras vencer 1-3 al Getxo y empatar 0-0 en Zamudio, hoy a las 11.00 horas se miden en Itxasgane al Bermeo en un duelo solidario para recaudar fondos para los niños con enfermedades raras, con entradas a dos euros. El primer amistoso en Urbieta se celebrará el 5 de agosto, contra el Portugalete. Servirán ambas contiendas para ir preparando el inicio liguero, en el que visitarán al filial del Sporting de Gijón. El primer choque oficial en casa será ante un histórico, el Racing de Santander.

Dichos rivales son posibles debido a la nueva composición del grupo II de la Segunda División B, del que han desaparecido madrileños, canarios y manchegos y al que se han unido Asturias, Cantabria, Burgos y Nafarroa, lo que propiciará un ahorro a los clubes vizcainos tanto en viajes como en hoteles. Aún así, “estamos un poco abandonados”, resumió Luaces. “El equipo ya lo teníamos casi hecho para cuando se anunciaron los grupos, ese atraso dificulta la planificación”, añadió.