SI futbolísticamente hablásemos de una de las mayores irrupciones en la escena profesional de los últimos tiempos, Dele Alli, sensación mundial y uno de los grandes objetos de deseo del presente panorama balompédico, sería uno de los candidatos.
De origen nigeriano, Bamidele Jermaine Alli, conocido como Dele Alli, tiene la nacionalidad inglesa, 20 años, 188 centímetros de estatura, es espigado, diestro y se faja como centrocampista en el Tottenham. Su nombre copa portadas. ¿Saben de ese tópico que reza que los jóvenes necesitan de paciencia? Dele Alli, no. Su escalada es vertiginosa como pocas.
Hace apenas año y medio, Alli jugaba para el Milton Keynes de su ciudad natal. Lo hacía en la League One inglesa, equivalente a la Segunda División B española, tercera categoría en el orden del escalafón. Con un último curso de 44 partidos y 16 goles en el Milton Keynes cautivó al Tottenham, que desembolsó alrededor de 6 millones de euros para hacerse con sus servicios.
Desde que llegó a los Spurs, todo han sido rosas y champán. Si en agostó de 2015 debutó en la Premier League, en octubre ya había recibido la llamada de la selección inglesa, donde ha disputado 15 encuentros hasta la fecha, incluidos cuatro de la pasada Eurocopa. La primera temporada con los Spurs se cerró para Alli con unos envidiables 46 partidos disputados, una decena de goles y once asistencias. Sus actuaciones le encumbraron como mejor joven de la máxima categoría del fútbol inglés, título de reconocimiento mediante, y participó en el tuteo del Tottenham a los colosos del país inglés. La tropa que dirige Mauricio Pochettino fue tercera en la Premier y se ganó el billete para la Champions League. Hasta entonces, los Spurs solamente habían participado en dos ediciones de la máxima competición continental (1961-62 y 2010-11). Allí tuvo algo que ver en todo ello.
Esta campaña los números del talentoso futbolista son mejores aún. En liga suma 21 partidos y 11 goles. Es el centrocampista más goleador de los todas las ligas de primera división del mundo, únicamente superado por el brasileño Fabio Lima, de 23 años, que en el Al-Wasl de los Emiratos Árabes Unidos ha firmado 17 goles en 14 encuentros, y por el norirlandés Paul Heatley, de 29 años, que en el Crusaders de su país ha materializado 14 dianas en 29 compromisos. De las grandes ligas, es el centrocampista con más pólvora. De hecho, desde que se mudara al Tottenham en el curso 2015-16, en el cómputo global ningún mediocampista de Inglaterra ha anotado más tantos que Alli, un depredador que se crece desde la segunda línea de ataque.
Por dar una referencia, Alli ha necesitado 52 partidos para alcanzar la veintena de goles en la Premier League. En su día, iconos de los últimos tiempos en Inglaterra como Steven Gerrard (169 partidos), Frank Lampard (140), David Beckham (90) o Paul Scholes (74) necesitaron muchos más duelos que esta perla con aspecto de endeble.
Pero además Alli tiene magia. Los acontecimientos le sonríen. Su persona ha establecido una regla no escrita en Inglaterra: si Alli marca, el Tottenham no pierde. Esto se ha dado ya en 17 partidos (12 triunfos y 5 empates), lo cual, teniendo en cuenta que solo amasa un total de 21 goles en liga vestido por los Spurs, es encomiable a la par que curioso. Luego ha tenido momentos álgidos como el partido que le enfrentó al Chelsea, al cual marcó de cabeza por partida doble. Hasta entonces, en la presente temporada ningún jugador había sido capaz de marcar con la testa a los blues de Antonio Conte.
La preocupación que reside ahora en el Tottenham es que no ocurra lo mismo que con Modric o Bale. Cuando Alli recaló en Londres firmó un contrato de 5 años a razón de un millón y medio de euros por curso. En septiembre gozó de una mejora, su salario engordó hasta los 3,6 millones. Aunque parece ser escaso blindaje. “Si yo fuera el entrenador del Real Madrid o del Barça, querría fichar a Dele Alli. Diría que ahora mismo es el mayor objetivo”, sostiene el mítico Osvaldo Ardiles, leyenda de los Spurs. Según informa el Sunday Express, el Madrid “irá con todo a por el jugador” y pondrá 60 millones para reclutarle en verano. Si bien, se antoja que brotará competencia. El joven está en boca de todos, en las agendas de los grandes clubes de Europa. Alli es magia.