bilbao. El campeonato liguero vuelve hoy a escena con los focos puestos en la desbocada carrera que mantienen el Barça y el Real Madrid por ganar el título. Tanto es así que el equipo blanco logró el pasado domingo frente a Osasuna su victoria número veintinueve, lo que ha supuesto el récord de mayor número de triunfos conseguido por un equipo la misma temporada liguera, y ni así le alcanza para superar al Barça en la clasificación.
O dicho de otro modo. El Barça está obligado a superar los 92 puntos, récord absoluto en la historia de la Liga, para revalidar el título que alcanzó la pasada campaña.
En esta apasionante carrera el Barça lleva delantera, de puntos, y psicológica, como se demostró la pasada jornada. Lejos de caer en cualquier tipo de depresión o complacencia, los hombres de Pep Guardiola reaccionaron a su eliminación de la Champions ante el Inter con furia, goleando al Villarreral en su campo (1-4) y dejando claro que ya sólo tienen entre ceja y ceja el objetivo de la Liga.
Las pasmosa facilidad con la que el Barça despachó al Villarreal, una de las plazas en donde podía sucumbir el equipo azulgrana, se notó sobremanera al día siguiente en el Santiago Bernabéu, donde el Real Madrid jugó sin fe y mucha desgana. Tanta que Osasuna estuvo a punto de quitarles dos puntos y sentenciar, o casi, la Liga, si no es porque Cristiano Ronaldo, en su papel de estrella máxima y héroe del madridismo, acudió presto a su rescate anotando dos goles, el segundo a falta de dos minutos para la conclusión del encuentro (3-2).
"Es difícil que el Barcelona pinche", admitió ayer el jugador brasileño del Real Madrid Marcelo, reflejando así el sentimiento generalizado que al parecer existe en el vestuario blanco.
Como viene siendo costumbre, el Barça vuelve a jugar antes que el Real Madrid en la trigésimo sexta jornada liguera, con lo que supone de presión para el conjunto merengue. Y lo hace frente al Tenerife (20.00 horas, C+Liga y GolTv), antepenúltimo, que sólo ha ganado un partido lejos de la isla canaria. José Luis Oltra, su entrenador, tiene asumido el papel de víctima y ayer dijo que "descarta el factor sorpresa". Tampoco realizará marcajes individuales sobre Messi o Xavi. "Ahora mismo es el líder, un equipo muy en forma, necesitado. Quieren ganar y están mentalizados, como demostraron ante el Villarreal", afirma Oltra sobre su rival.
En contraste, Pep Guardiola, que probablemente repetirá el equipo que ganó en Villarreal, sigue emitiendo señales luminarias. Buen rollito. Hasta con su feroz contrincante, el Real Madrid. Tras calificar la temporada de su equipo de "insuperable", Guardiola admite que el Madrid "también ha hecho números de campeón" y se merece igualmente el título. "Los dos equipos se tiene que ir a casa orgullosos de la temporada que han hecho en la Liga", ensalzó el técnico catalán.
"Xavi jugará el Mundial" Guardiola lanzó otro mensaje, sobre Xavi Hernández, de quien aseguró que su participación en el Mundial de Sudáfrica no peligra, pese a que el jugador está disputando la recta final del campeonato liguero con una lesión muscular, una rotura en el sóleo.
"Que no se preocupen, que Xavi va a estar en el Mundial. Yo quiero que Xavi vaya al Mundial. Y, si yo sé que Xavi se lesiona y no puede ir al Mundial, no jugaría", zanjó Guardiola.