La pandemia, según el informe Mujeres, trabajos y cuidados: propuestas y perspectivas de futurol, en el que el CES dibuja un diagnóstico de la situación real de las mujeres a nivel social, económico y laboral y advierte de la necesidad de evitar los sesgos de género en la aplicación de las medidas de conciliación de la vida personal, laboral y familiar.

"Si algo hemos identificado es que la crisis del covid ha provocado una vuelta al hogar protagonizado por las mujeres y una parcialidad claramente involuntaria", destacaba ayer jueves la presidenta de la Comisión de Trabajo sobre la Realidad Social de las Mujeres del CES, y responsable del estudio, Elena Blasco.

Problema agravado

Las mujeres, ya antes de la pandemia desempeñaban empleos más precarios, con jornadas parciales y contratos temporales y eran mayoría en el sector cuidados, en hostelería y turismo, sectores especialmente golpeados durante los meses más duros de covid. Además, el cierre de las escuelas y el teletrabajo ha afectado de una forma más negativa a las mujeres que a lo hombres, tal y como ha señalado Blasco, que ha recordado que el 90 % de las reducciones de jornadas y excedencias las solicitan ellas. Y para ampliar el problema, la propia incidencia de la pandemia ha sido mayor entre las mujeres por su vulnerabilidad frente al contagio por estar más expuestas al patógeno debido a los empleos que desempeñan.

En este sentido, la presidenta de la Comisión de Trabajo del CES advierte de que el reparto desigual de los tiempos no sólo tiene que ver con el hecho de ser madre, sino también con las tareas de cuidados a mayores y dependientes y, en este ámbito, "el desequilibrio entre hombres y mujeres perpetúa el rol de cuidadoras" y afecta al desarrollo profesional.

largo plazo

En su informe, el CES lamenta que las políticas sociales no hayan podido impedir que el impacto global de la crisis fuera mayor en las mujeres y subraya la necesidad de seguir avanzando desde una perspectiva de género más a largo plazo y aprovechando las ayudas del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PERTE).

En opinión del CES, administraciones públicas, empresas y la sociedad en su conjunto deben implicarse para crear entornos más favorables a una distribución más justa de los tiempos, los trabajos y los cuidados y defiende una nueva economía para repartirlos de manera más equitativa.

En este sentido, el presidente del Centro Económico y Social, Antón Costas, destacado también la importancia que tendría para el desarrollo profesional de las mujeres la universalización de la educación gratuita entre los 0 y 3 años al tiempo que considera urgente hacer más accesibles los requisitos administrativos para acceder a las ayudas sociales.