El Consejo de Ministros aprobará hoy martes la reforma laboral pactada entre el Gobierno, sindicatos y patronal el pasado día 23 y con el que se da cumplimiento al objetivo comprometido con Bruselas de tener lista esta norma antes de finalizar el año.

La reforma pactada por las diferentes partes tiene entre sus principales objetivos la reducción de la elevada temporalidad en el mercado de trabajo. Y, en este sentido, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, confirmó ayer lunes que la norma incluirá una "tasa" para penalizar a las empresas que incurran en una rotación abusiva de contratos temporales.

Escrivá defendió ayer lunes la reforma laboral en contra de quienes opinan que no es tan profunda como se esperaba y que no deroga totalmente la reforma de Rajoy de 2012. Para el ministro, se trata de una reforma "muy ambiciosa", que nace del consenso con los agentes sociales tras una negociación "muy prolija", y en la que "abrumadoramente" se abordan los problemas y las deficiencias del mercado laboral.

Por ello, "no tiene ninguna duda" de que recibirá "un gran apoyo parlamentario" pese a las quejas de algunos grupos, como el PNV, por ciertos contenidos de la misma. Entre los problemas que trata de afrontar la reforma se encuentran la precariedad y la "enorme temporalidad". "Esto se aborda claramente, simplificando los contratos y haciendo del contrato indefinido el contrato central, pero con márgenes de flexibilidad", subrayó Escrivá.

Dos tipos

La norma establece que el contrato de trabajo ordinario será el indefinido y que solo podrán hacerse dos tipos de contratos temporales: el estructural y el formativo. El primero de ellos, el estructural, solo podrá responder a dos causas: por circunstancias de la producción y por sustitución de otro trabajador con reserva de puesto de trabajo, siempre y cuando quede perfectamente especificado a quien sustituye el trabajador contratado.

Por su parte, el contrato por circunstancias de la producción solo podrá concertarse por incrementos ocasionales imprevisibles de la producción u oscilaciones de la demanda, por un tiempo máximo de seis meses, ampliables a doce si así lo establece el convenio colectivo sectorial de turno. Esta causa podrá emplearse en situaciones previsibles, como las campañas de Navidad o agrícolas, por un periodo máximo de 90 días al año no consecutivos.

Además, el acuerdo establece reducir a 18 meses en un periodo de 24 meses el plazo de encadenamiento de contratos para adquirir la condición de trabajador indefinido, frente a los 24 meses en un periodo de 30 meses vigente actualmente. El incumplimiento de las normas que regulan la contratación temporal llevará a que el trabajador sea considerado indefinido. De hecho, se elevarán las sanciones contempladas en la Ley de Infracciones y del Orden Social (LISOS) por el uso fraudulento de la contratación temporal, estableciéndose multas por cada situación fraudulenta y no por empresa. Y se penalizará a las empresas que incurran en una rotación abusiva de contratos temporales.

Erte

La reforma también persigue acabar con el recurso abusivo del despido mediante una fórmula ensayada en la pandemia: los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), un modelo que la reforma "moderniza, generaliza y extiende", según Escrivá.

Pese a que algunos socios del Gobierno de coalición han manifestado su intención de modificar la reforma laboral en el trámite parlamentario, Escrivá cree que la norma saldrá adelante con un gran apoyo. "Hay que respetar el trámite parlamentario, por supuesto, pero estoy convencido de que una reforma como esta, tan ambiciosa va a recibir gran apoyo parlamentario, no tengo ninguna duda", subrayó.

Reacciones

Pensionistas. El Movimiento de Pensionistas de Euskal Herria se movilizó ayer en Bilbao para denunciar que la reforma laboral acordada entre Gobierno, patronal y los sindicatos CCOO y UGT "no toca los elementos regresivos de las reformas de 2010 y 2012". Los pensionistas consideraron que es "más necesario que nunca contestar con fuerza". Por ello, apostaron por "llenar y desbordar las calles" de las tres capitales vascas y de Iruñea el próximo 15 de enero, cuando se manifestarán en defensa de sus reivindicaciones. "Estamos frenando algo que viene del sistema capitalista: el desmantelamiento del estado de bienestar, destruir lo publico, hacer negocios con las personas y no poner los cuidados ni la vida en el centro", añadieron.

Tramitación. El Portavoz del PSOE, Felipe Sicilia, no aclaró ayer si la reforma laboral se va a tramitar finalmente en el Parlamento como proyecto de Ley.