El consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, ha asegurado este viernes que el Gobierno vasco mantiene las previsiones de crecimiento económico para 2021 y 2022 aunque ha reconocido que "como siempre y más en estos momentos de especial zozobra económica" están sujetas a contingencias "difícilmente predecibles".

Entre estas "contingencias" ha citado la evolución de la pandemia de la covid-19, las tensiones inflacionistas, el suministro de materias primas, el precio de la energía y "un largo etcétera".

Azpiazu ha contestado así en el pleno de la Cámara de Gasteiz a una pregunta del parlamentario del grupo PP+Cs Luis Gordillo sobre las directrices económicas del Gobierno vasco para la elaboración del proyecto de ley de los Presupuestos autonómicos para el próximo ejercicio.

El consejero ha dicho que el Ejecutivo vasco mantiene las previsiones de crecimiento de PIB para este año en el 6,7 % y en el 6,4 % para 2022, teniendo en cuenta el cuadro macroeconómico del segundo trimestre de este año, una referencia que servirá para la elaboración de las cuentas públicas.

Ha explicado que las directrices económicas pondrán el foco en aprovechar al máximo la oportunidad de la llegada de los fondos europeos y en la relajación de las reglas fiscales para aprobar un presupuesto "expansivo" que consolide la salida de la crisis y que lance un "ambicioso" plan de inversiones.

Ha adelantado que los presupuestos priorizarán el gasto en el sistema sanitario, en el educativo, en la atención de los colectivos más necesitados, así como en el apoyo al tejido empresarial, especialmente a las pymes, y en el fortalecimiento de las políticas activas de empleo y formación.