La directora general de la Agencia Vasca de la Innovación, Innobasque, Leire Bilbao, destaca la importancia de la innovación para hacer frente a los retos que plantean momentos de cambio relevantes como el actual, y en definitiva, para avanzar hacia el futuro, como expresan incluso en el lema del Global Innovation Day que mañana celebran.

¿Cómo valora estos premios Vodafone Deia Innovation Sariak, con los que se reconoce la innovación en empresas e instituciones vascas?

—Las empresas, especialmente las pymes, nos transmiten que valoran muy positivamente este tipo de reconocimientos. Nuestro objetivo es incrementar el número de pymes innovadoras en Euskadi y visibilizar su actividad innovadora ayuda a otras, demuestra los beneficios de innovar y de que es posible para las organizaciones de menor dimensión.

¿A su modo de ver, ¿qué beneficios tiene una iniciativa como esta para las empresas?

—Los reconocimientos y premios sirven de inspiración para que empresas que no innovan entren en la rueda de la innovación. Aportan visibilidad a las empresas premiadas y a todas las candidaturas, y son una buena herramienta para darse a conocer a públicos diversos. En un plano más emocional suponen una gran satisfacción para los equipos de personas que han trabajado en esos proyectos.

¿En cuanto a Innobasque, ¿cuáles son los proyectos más destacados que tienen entre manos actualmente?

—Durante la pandemia hemos acelerado un proceso de escucha y acompañamiento para nuestras pymes, con el fin de responder a sus necesidades de cambio a corto plazo y de transformación a medio. Actualizamos el Informe Innobasque de Prospectiva 2020. Reflexiones post Covid 19 y hemos articulado un canal abierto para identificar con nuestros socios las oportunidades que las megatendencias de innovación están acelerando en esta nueva era. Mañana presentaremos un avance del Informe Innobasque de Innovación 2020, que realizamos cada dos años y que mide el estado de la innovación en Euskadi. Este año muestra las lecciones aprendidas de las anteriores crisis. Es decir, continuamos con nuestra labor de evaluación del Sistema Vasco de Ciencia, Tecnología e Innovación y sus agentes, hacemos prospectiva para identificar el impacto de las megatendencias de innovación en Euskadi y fomentamos una cultura de prospectiva entre nuestros asociados. Junto a nuestras organizaciones socias privadas y públicas diseñamos y desarrollamos proyectos piloto de innovación que luego extendemos al resto del tejido empresarial; colaboramos con las administraciones públicas en sus planes y estrategias de innovación. Además, ofrecemos servicios de ayuda y acompañamiento a todas las organizaciones vascas para que puedan aprovechar al máximo las oportunidades de negocio y financiación para innovar que pone a su disposición la Comisión Europea.

¿Innobasque ayuda a las empresas a buscar ayudas a la I+D+i de las administraciones vascas, estatales e incluso a nivel europeo?

—Les acercamos los servicios que están disponibles por parte de los diferentes agentes de innovación y cada semana les mantenemos puntualmente informadas de todas las ayudas vascas, estatales y europeas a la I+D+i a las que pueden acceder. En el caso de las ayudas de Europa, como decía, ayudamos y acompañamos en el proceso de presentación a diferentes convocatorias. En definitiva, ofrecemos servicios de ayuda para conseguir socios de negocio internacionales, encontrar tecnologías e ideas para crecer, socios empresariales y asesoramiento especializado. Junto al Grupo Spri, las cámaras de comercio y Beaz participamos en la mayor red europea de apoyo a pyme, Enterprise Europe Network.

¿Les enseñan también a innovar en sus modelos de negocio? ¿Cómo?

—Como agente evaluador que mide el estado de la innovación en Euskadi, habíamos identificado que la debilidad de nuestro sistema radica en la innovación de las pymes en aspectos organizativos, de gestión de personas, relacionados con el marketing, y los nuevos modelos de negocio que facilita la digitalización. Como agencia de innovación, Innobasque detecta necesidades de nuestras organizaciones que no están suficientemente cubiertas y desarrolla proyectos piloto de no más de dos años para probar o prototipar una determinada actuación. Es el caso del piloto de innovación en nuevos modelos de negocio, cuya necesidad se ha acelerado con la pandemia.

Innobasque ha participado recientemente en la Cumbre de Innovación 2020 en Portugal. ¿Qué cuestiones se han analizado en este foro?

—Esta cumbre de innovación analizó cómo debe ser la próxima política industrial de la Unión Europea en la era post-Covid-19. Durante mi intervención subrayé que, a pesar de la evolución de las inversiones empresariales, Euskadi ha obtenido buenos resultados gracias a la especialización, la eficiencia y la orientación a resultados. También añadí que el concepto de globalización está siendo reconsiderado, ya que esta crisis ha mostrado que no somos autosuficientes y por ello deberemos conocer cuáles son nuestros límites y volver a analizar nuestras cadenas de valor, regulación, etc.

En cuanto al Informe de Prospectiva 2020

—Lanzamos el Informe de Prospectiva 2020 esta primavera como respuesta a esta situación tan especial, para analizar si las megatendencias con impacto en Euskadi que habíamos identificado en 2019 seguían vigentes. Y la conclusión es que sí, siguen vigentes e incluso que el impacto de algunas (como las relacionadas con la digitalización o la sostenibilidad) se ha acrecentado y acelerado. En este escenario de pandemia y post-pandemia hemos visto, además, que necesitábamos enfocar las oportunidades de innovación en las empresas para ayudarlas a salir de esta crisis y a competir nuevamente. Porque un cambio de ese calibre en el entorno no puede o no debe paralizarnos, sino que tenemos que seguir mirando al corto plazo pero también al medio y al largo.

¿Cuáles son, de forma resumida, las principales conclusiones que se desprenden del mismo?

—Destacaría que el informe identifica de forma muy clara tres oportunidades para la innovación. Por un lado, la digitalización como factor indispensable en el proceso transformador. La preocupación por la salud poniendo de manifiesto la relación directa que existe entre salud y el cuidado de nuestro ecosistema medioambiental. Y, por último, el trabajo conjunto entre diferentes disciplinas que van a terminar convergiendo tecnológicamente y generando espacios de innovación más dinámicos. En el informe hemos identificado siete ámbitos en los que es necesario innovar para avanzar, recuperarnos y competir nuevamente: vigilancia y prospectiva, estrategia (de empresa, de negocio y de innovación), organización y cultura, transformación digital /tecnológica, mercados actuales y potenciales, operaciones y sostenibilidad (economía circular).

¿Se ha revelado la innovación como necesaria en estos tiempos de pandemia? ¿En qué ámbitos, el sanitario, por ejemplo?

—Uno de los efectos de la pandemia es que el impacto de las tendencias está siendo mucho más severo del previsto en la mayoría de los casos, poniendo de manifiesto la debilidad de muchos de nuestros sistemas, y por lo tanto también ha de cambiar la manera en la que se tomen las decisiones para posicionarnos en un escenario futuro. Hay algunos elementos que se refuerzan significativamente, como el poder de la innovación colaborativa; y la innovación "frugal", que trata de innovar mejor, más rápido y barato. En la misma línea, las oportunidades y amenazas y las tecnologías que se habían priorizado siguen siendo válidas en el contexto actual, aunque con varios matices. Si nos referimos a las oportunidades, la transformación digital no es sólo una prioridad, sino una necesidad, la preocupación por la salud y su relación con el medioambiente se han reforzado, y la intersección entre disciplinas y convergencia tecnológica toma aún más relevancia que antes.

¿Y en la era post-Covid va a ser imprescindible para las empresas innovar de cara a ser más competitivas y a aumentar su facturación?

—Esta crisis ha demostrado que una acción conjunta, coordinada y en colaboración puede reducir los impactos negativos que la Covid-19 ha tenido y seguirá generando. Hemos sido testigos de la capacidad de reacción rápida de las empresas y las personas ante una situación no prevista y hemos comprobado el potencial de la colaboración entre empresas y personas. Innovar es ahora más importante que nunca, ya que incluso en el escenario actual hay oportunidades y necesidad de "reimaginar" los modelos de negocio y de operaciones así como los productos y servicios desarrollados por las empresas. Las cadenas de suministro globales se han visto afectadas poniendo de manifiesto la dependencia de Europa y también de Euskadi de los proveedores externos, fundamentalmente, chinos. Pero además, tenemos claro que es necesario realizar una apuesta importante en sostenibilidad. El Pacto Verde, el Green Deal, lanzado por la Comisión Europea, es una herramienta clave para ello.

Innobasque celebra mañana el Global Innovation Day, su gran cita anual. ¿A qué aspecto concreto está dedicado este año?

—Innovar para avanzar es el lema de este año. Vamos a mostrar la importancia de la innovación para hacer frente a los múltiples retos que plantean momentos de cambio relevantes como al que nos estamos enfrentando actualmente. Para ello, presentaremos una muestra representativa de cinco casos prácticos de innovación de Euskadi que han sabido responder con éxito a diferentes situaciones de crisis. Nos acompañará desde Bruselas el economista jefe de la Dirección General de I+D e Innovación de la Comisión Europea Román Arjona y presentaremos un avance de los principales resultados del Informe Innobasque de Innovación 2020. Para analizarlo vamos a contar con la participación de la comisionada para la Ciencia, la Tecnología y la Innovación, Cristina Uriarte, y otros expertos de primer nivel. Finalmente, el lehendakari cerrará el acto que inaugura la XX Semana de la Ciencia, Tecnología e Innovación en Euskadi.

Leire Bilbao analiza la situación de la innovación en Euskadi en un escenario marcado por las consecuencias de la Covid-19, en el que se agranda la brecha entre los territorios más innovadores y el resto.

¿Cómo es el nivel de innovación en Euskadi?

—En la anterior y reciente crisis, entre 2010 y 2015, las empresas vascas redujeron un 9% la inversión en I+D; las europeas, de media, la incrementaron en un 23,5%. Este dato nos preocupa sobremanera. Mientras nosotros desaceleramos otros pisan a fondo el acelerador. La brecha entre los territorios más innovadores y el resto se agranda. Hay que revertir esta tendencia.

¿Cuáles son los sectores más punteros en innovación?

—La estrategia vasca de especialización inteligente RIS3 Euskadi que impulsa el Gobierno vasco identifica tres fundamentales: fabricación avanzada, energía y biociencias salud. También alimentación, hábitat urbano, ecosistemas e industrias culturales y creativas han sido señalados como territorios de oportunidad.

¿Cuáles son los principales indicadores que posicionan Euskadi como región innovadora en Europa?

—Nuestras fortalezas residen tradicionalmente en el alto nivel educativo de la población, el empleo en sectores intensivos en tecnología, la venta de nuevos productos y la cualificación del personal de I+D, donde la presencia de mujeres aumenta. También es importante el porcentaje de personal investigador, así como el número de personas con el título de doctorado.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, ha citado Euskadi como ejemplo de innovación digital en su discurso ante el plenario del Comité de Regiones de Europa que acaba de tener lugar. ¿Son importantes estos reconocimientos del exterior?

—Este tipo de declaraciones refrendan la labor llevada a cabo y ponen el Sistema Vasco de Innovación en el mapa. El hub de innovación digital va a permitir a las empresas vascas, a las pymes, desarrollar nuevos proyectos digitales y a las industrias renovarse mediante la utilización de diferentes tecnologías, datos, inteligencia artificial, etc. Es una inversión estratégica para Euskadi.

¿Cómo se percibe el futuro de la innovación en Euskadi?

—La crisis actual no puede volver a tener el impacto de la anterior. Tenemos que invertir más para seguir el ritmo que otras regiones europeas están marcando. A más crisis más inversión en I+D, más innovación, desde lo público y desde las empresas privadas. Estamos en una época muy complicada; la Covid está cambiando muchas cosas pero no altera ni nuestro tablero de juego, que va a seguir siendo Europa, ni nuestro espíritu emprendedor, innovador y combativo. Y nosotros, como Agencia Vasca de la Innovación, como estructura público-privada, con una base de socios potente y poderosa, vamos a ser un foro de debate y de planteamiento de vías de evolución y de elementos de transformación.

¿En qué medida le afectará la crisis provocada por la pandemia?

—Cada vez somos todos más conscientes de que la innovación va a adquirir más valor, más importancia que en la época previa a la Covid-19, porque es la clave de una salida exitosa de la crisis. La innovación es la respuesta a la situación en la que nos encontramos en este momento. Esto ha sido así a lo largo de toda nuestra historia. Nuestro bienestar viene de la ciencia y la tecnología, de los descubrimientos que han permitido que la humanidad avance y mejore, que aumente su esperanza de vida; de las innovaciones aplicadas a todos los sectores de nuestra sociedad. Investigación e innovación son la apuesta estratégica del Gobierno vasco para situar Euskadi entre los países más avanzados de Europa y resolver nuestros principales retos.