El sindicato LAB ha exigido a la dirección de Tubos Reunidos que retire el nuevo ERTE de 8 meses de duración, con una afectación de un 66 %, que ha presentado, y ha reclamado un plan de viabilidad "que permita salir a la empresa de la deriva a la que la están llevando".

En una nota, la organización ha considerado "un sinsentido" presentar un nuevo ERTE de 8 meses de duración "cuando, como se recoge en la propia memoria explicativa, la dirección tiene previsto presentar un plan de viabilidad antes de la finalización del 2020, para los años 2020 y 2021".

Ese plan prevé, entre otras opciones, abordar reestructuraciones y nuevas medidas organizativas, además de ejecutar como dicen un plan estratégico para los años 2022 y 2024, recuerda LAB.

"No podemos entender la presentación en este momento de un ERTE con una afectación tan alta y una duración tan elevada, cuando desconocemos por completo cuál es el proyecto de futuro que nos van a presentar a la plantilla", ha señalado.

El sindicato ha expresado el hartazgo de los trabajadores ante "la utilización que viene haciendo la dirección de los ERTE como herramienta de flexibilización" y ante la destrucción de empleo y la pérdida de poder adquisitivo por la utilización abusiva de esos expedientes, mientras que los miembros del comité directivo del Grupo Tubos Reunidos, "responsables del caos y del desastre organizativo actual de la empresa, han sido capaces de doblarse el sueldo en estos últimos años".