donostia - La incertidumbre generada en torno a la automoción, un sector en plena transformación, ha tenido una influencia negativa directa sobre la máquina herramienta, que durante el pasado año vio cómo caía su facturación un 6,8% y que afirma que deberá afrontar un 2020 "duro" con previsiones de que se volverán a registrar pérdidas.

AFM Cluster, que integra a los fabricantes de máquina herramienta del Estado donde los ubicados en Euskadi son clara mayoría, comunicó ayer el balance correspondiente al pasado ejercicio en el que, tras años consecutivos con crecimientos más o menos pronunciados de facturación, los beneficios se redujeron casi siete puntos porcentuales.

La incertidumbre en torno al automóvil ha truncado las expectativas de AFM Cluster, que a inicios del año pasado redujo la influencia de este factor y previó crecer a ritmos de 2018, ejercicio que cerró con un aumento de la facturación del 2,8% debido sobre todo a las exportaciones.

Sin embargo, las ventas al exterior en 2019 también se han reducido ocho puntos porcentuales con respecto al año anterior. No obstante, hay que recordar que aquel ejercicio significó batir marcas en exportaciones, por lo que el sector muestra su satisfacción por el comportamiento de los mercados exteriores que le ha permitido vivir "uno de los mejores años de la historia en este aspecto".

Los países que más han contribuido a frenar la caída han sido Alemania con el 12,7% del total de ventas al exterior, EE.UU. (10,7%), Portugal (7,8%), Italia (7,7%) y China (7,5%), a las que siguen Francia, México, India, Polonia y Reino Unido.

La evolución de la máquina herramienta en 2019 ha intensificado una tendencia negativa que ya comenzó un año antes, cuando el sector de la deformación, íntimamente relacionado con la automoción y tradicional palanca del sector, cayó un 4,7%. En este caso, el descenso ha sido muy superior, del 13%, lo que ha lastrado los resultados.

"La deformación se ha visto afectada por la decisión de la automoción de posponer en 2019 una buena parte de sus inversiones productivas ante los cambios tecnológicos y de demanda relacionados con la movilidad sostenible", admitió César Garbalena, presidente de AFM Cluster, quien añadió como un factor desfavorable que esta actividad además no tiene la misma capacidad que el arranque para apuntalar una cartera que garantice una buena carga de actividad.

El arranque, por su parte, tuvo un descenso más suave del 4,3% en un año que AFM calificó de "bueno" porque el anterior había caído un 15% motivado por otro tipo de incertidumbres más relacionadas con las relaciones comerciales internacionales, aunque comenzaba a vislumbrarse el efecto de la automoción.

El resto de subsectores como los componentes y equipos, las herramientas y los accesorios, en cambio, presentaron una evolución algo más positiva, comunicó la asociación.

previsiones Si 2019 cerró con resultados negativos, los integrantes de AFM Cluster no parecen mostrarse más positivos con respecto al presente. Se basan para ello en el inicio del año, que "ha comenzado con la misma tónica", lo que significa una moderación en las previsiones de inversión en bienes de equipo motivada por la incertidumbre a nivel mundial.

"2020 va a ser un año duro", afirmó AFM Cluster. Su presidente explicó que "la situación es complicada, en especial para los que trabajamos con el sector de automoción directamente". La mejoría se produciría a final del ejercicio, según apuntan los análisis de prospectiva de la asociación, a lo que Garbalena añadió que "esto último no está garantizado". El director de AFM Cluster, Xabier Ortueta, aclaró que "debido a los largos periodos de maduración de nuestros productos y los datos de captación (de pedidos), la facturación se verá afectada a finales de 2020".