washington - La reunión anual de los responsables de los principales bancos centrales del planeta en Jacskon Hole (EE.UU.), uno de los foros mundiales de debate más influyentes sobre política monetaria que se celebra desde 1978, comenzó ayer en Wyoming -en la madrugada europea- en medio de una creciente preocupación ante los indicios de una posible recesión económica.

El discurso del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, el más esperado, tendrá lugar hoy ante la selecta audiencia de banqueros centrales, en un momento de gran expectación después de que las alarmas sobre una potencial regresión se encendieran la semana pasada en EE.UU.

Los inversores esperan que Powell dé alguna pista sobre los próximos pasos de la Fed después de que en su última reunión, en julio, los responsables del banco central estadounidense decidieran rebajar los tipos de interés hasta el rango de entre el 2 y el 2,25%, aunque no está claro si lo hará. Ese fue el primer recorte del precio del dinero en EE.UU. en más de una década, ya que el anterior se produjo justo después de la aguda crisis financiera de finales de 2008.

A nivel global, el simposio económico de Jacskon Hole llega con un panorama definido por la volatilidad de los mercados financieros, la escalada de la tensión comercial entre Washington y Pekín, la amenaza de una guerra monetaria y la desaceleración del crecimiento económico mundial.

Pese al carácter académico del encuentro, la cita ha ido congregando cada vez más atención mediática, ya que ha sido aprovechada por varios predecesores de Powell, como Ben Bernanke o Janet Yellen, para adelantar importantes medidas como el fin del programa de compra de deuda de la Fed o inminentes subidas de tipos.

La siguiente reunión de política monetaria del banco central estadounidense está prevista para el 17 y 18 de septiembre y en ella se presentarán las nuevas proyecciones macroeconómicas de Estados Unidos. Nadie se atreve a vaticinar qué es lo que ocurrirá en ese encuentro de septiembre, pero el presidente estadounidense, Donald Trump, sí osa presionar a Powell y sus colegas para que continúen con la rebaja del precio del dinero para “impulsar la economía”. El mandatario ha llamado a Powell “despistado” y ha criticado en varias ocasiones la “falta de visión” del banquero al frente de la Fed, un gesto inusual entre los presidentes de EE.UU.

La lista completa de los más de 120 asistentes, que siempre se guarda con celo, aún no ha sido dada a conocer, pero se espera que el gobernador del Banco de Canadá, Stephen Poloz, y el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, entre otros, asistan a la gran cita de política monetaria que terminará mañana sábado. - Efe