BILBAO. Los trabajadores ya siguieron una primera huelga el 1 de febrero en demanda del convenio provincial, que afecta a cerca de 23.000 empleados. El llamamiento fue efectuado por ELA, LAB, ESK y CGT, que cuentan con más del 50 % de la representación en el sector, no así por CCOO y UGT. Son los mismos sindicatos que han convocado los dos nuevos paros.

El convenio en este sector está decaído desde 2013 por efecto de la última reforma laboral. Tras 15 reuniones negociadoras en los últimos diez meses, "lejos de existir avances, vemos que la patronal Cebek y las empresas que se esconden tras ella han bloqueado la negociación y afirman que solo seguirán negociando si se empeora el convenio", han señalado hoy los trabajadores en la comparecencia en Bilbao.

Los sindicatos han acusado a la patronal vizcaína Cebek de plantear un convenio peor que el vigente, "quitando" el concepto de antigüedad y la "garantía mínima" de subida de sueldo que asegura la revalorización de los salarios en el sector, según han explicado.

"En cinco años no se nos han revisado las tablas, los trabajadores han perdido un montón de dinero y no podemos seguir así", ha agregado.

Según la patronal, en la negociación ofrece mantener la jornada laboral y un incremento salarial del 2,5 % para 2018 y del 1 %, 1,25 % y 1,5 % para los años siguientes. Para los sindicatos, al no reconocer los atrasos de los cinco años anteriores ni una referencia al IPC en los incrementos salariales se condena a los trabajadores a perder dinero.

El jueves 22 de marzo habrá una manifestación en la plaza Moyúa, y en abril varias movilizaciones más que culminarán en las huelgas de los dos días citados.