el psicólogo conductista alemán Erich von Holst (1908-1962), estudió las conductas de animales descubriendo modos y motivos de coordinación de conductas entre sí. En uno de sus experimentos con peces extrajo una parte del cerebro de uno de ellos para reducir su tendencia a volver al banco de peces cuando se veía nadando solo. El resultado fue que el pez que había perdido su espíritu grupal tendía a convertirse en líder al que los demás seguían. Los habituados a seguir a otros lo veían como alguien que parece saber a dónde ir y aceptaban encantados tan clarividente liderazgo.

Pienso que el experimento explica muchos comportamientos de los seres humanos en grupo, y tener en cuenta este factor de irracionalidad puede ayudarnos a evitar seguimientos automáticos sin dirección inteligente.

Hace ya algunos años, pude comprobar un caso afortunadamente intrascendente de esta tendencia a seguir al líder decidido. Tras una larga reunión de 7 directivos en la sede central de una multinacional, se levantó la sesión para dar inicio a una comida que habría de tener lugar en las propias dependencias de la empresa. Los siete nos pusimos en marcha, uno detrás de otro por los pasillos del edificio siguiendo al director de la compañía alemana y, tras cruzar tres puertas, los 6 seguidores optamos por girar 180 grados y salir de los lavabos en que habíamos entrado inadvertidamente siguiendo a quien encabezaba el grupo sin haberse dado cuenta de que había iniciado un movimiento del tipo de los que se dan en los bancos de peces o en las manadas de rumiantes.

Se han creado programas de ordenador capaces de predecir e imitar los movimientos de bandadas de pájaros en base a puntos a los que se les dan las pocas instrucciones que definen el comportamiento de cada ave. Muchas de las bandadas de aves que contemplamos en películas no son reales sino creadas por ordenador, pero con movimientos idénticos a los que observamos en la naturaleza ya que siguen las mismas reglas de comportamiento.

Al actuar en grupo formamos una masa de puntos individuales de decisión pero con comportamientos previsibles en muchos casos como grupo. Cada uno se siente libre, pero en realidad se suma y sigue al grupo en casi todos los casos. Veíamos al principio que una buena razón por la que puede surgir un liderazgo en una masa de individuos es la decisión con que avanza uno de ellos. El caso es que puede ocurrir que el líder esté creando su propio camino por inteligencia clarividente, por rechazo al grupo, por una visión que le ha motivado en función de sus propios intereses, o por una simple originalidad, fe ciega, o anomalía mental.

Les recomiendo vivamente que no dejen de ver el documental "Inside job" , porque comprobarán con inquietud que los líderes de las finanzas mundiales entrevistados se comportaron antes y durante la primera fases de la crisis como el pez de nuestra historia, aunque eso sí con excelentes consecuencias para su patrimonio.

Preocupación más próxima para nosotros son los actuales gobernantes de España que avanzan con decisión por los senderos del neoliberalismo, siguiendo con fe religiosa las doctrinas de Hayek y Friedman. La mayor parte de la población les sigue al ver la seguridad en sí mismos que demuestran y por la sensación de inevitabilidad que nos invade.

Están logrando frenar bruscamente la economía con consecuencias catastróficas para millones de ciudadanos, a cambio de la confianza en la clarividencia del líder que asegura saber que después vendrá inexorablemente el progreso para todos. El dolor es seguro, el éxito poco probable y el reparto del resultado en caso de ser bueno no favorecerá especialmente a los ahora sacrificados.

Un país no es una sociedad anónima, ni mucho menos un hogar como se trata de argumentar al buscar justificación para ajustar el gasto al ingreso de cada año. La disminución del salario mínimo es un drama para los más débiles y en poco aumenta la competitividad internacional, porque las empresas exportadoras no son las que pagan salarios mínimos con excepción de algunas actividades agrícolas. Las pensiones también se ven recortadas al aumentar la presión fiscal. Los servicios sociales se recortan, el desempleo aumentará y el porcentaje de perceptores de subsidio de paro y de cotizantes va a disminuir. Etc. etc.

¿Hasta cuándo seguirá el banco de peces al pez líder que nunca presentó una idea, siempre aseguró tenerlas y ahora aplica simplemente las que piden las agencias?