BILBAO. Los trabajadores de varias plantas del grupo Arcelor Mittal, líder mundial del sector siderúrgico, como los de la Acería Compacta de Sestao, se van a encontrar en los próximos meses sin trabajo pero cobrando. Sometidos a un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de suspensión de contratos verán cómo en noviembre y diciembre no tendrán que acudir a la factoría pero seguirán percibiendo cerca del 90% del salario bruto. Cobrar sin trabajar parece bonito pero no es oro todo lo que reluce.

Y no lo es porque no hay que olvidar que no es la empresa -por cierto Arcelor es una compañía con importantes beneficios ya que ganó 1.790 millones de euros en el primer semestre, un 13% más que en el mismo periodo de 2010- la que abona el grueso del salario a sus trabajadores, que en el caso de la acería de Sestao son unos 400, sino el antiguo Inem.

En el ERE de suspensión de empleo de Arcelor Mittal, la empresa abona un complemento a las prestaciones que se reciben del Inem para que el trabajador percibe el 90% del salario bruto pero el grueso de la prestación, el 70% de la base reguladora, proviene de la Seguridad Social y el empleado está consumiendo parte de su derecho a las prestaciones de desempleo. También hay que tener en cuenta que en periodo de vacaciones generadas y baja laboral no se puede aplicar un ERE, y que durante la suspensión. de empleo no se generan vacaciones, si el pacto final no dice lo contrario.

La prestación de desempleo normalmente tiene una retención de IRPF muy baja, y esto hay que tenerlo en cuenta a la hora de realizar la declaración tributaria anual del trabajador sometido al ERE.

El cálculo de prestación de desempleo en un ERE es igual que el de una persona que ha perdido el empleo: base de cotización de los 180 últimos días trabajados, cotización durante los últimos 6 años, consumo de paro en los últimos años, tope máximo...

La cuantía de abono es: durante los 180 primeros días de prestación se percibe el 70% de la base reguladora. A partir del día 181, el 60%. El tope máximo de la prestación durante el año 2009 -en el que se firmó el ERE al que ahora se acoge Arcelor para cerrar dos meses la Acería de Sestao y que se ha prorrogado en varias ocasiones- para un trabajador sin hijos es de 1.076 euros al mes. Durante los días de suspensión de empleo, la empresa sí paga su parte de la Seguridad Social y el trabajador paga el 65% del 4,7% de contingencias comunes, el 35% restante lo abona el antiguo Inem.

Desde el punto de vista del trabajador, otro aspecto negativo de la resolución de los expedientes, es que de aprobarse un ERE por causas productivas, existe una causa que podría ser utilizada en un futuro ERE de extinción de contratos. Por eso es muy importante antes de la decisión final, garantizar la viabilidad futura de los centros de trabajo, que es un año en todos los centros de Arcelor en el Estado.

Con todo, los trabajadores fijos de Arcelor Sestao son conscientes de que en la actual coyuntura son unos privilegiados, "con el recorte de la actividad que ya se veía venir porque estábamos produciendo mucho menos, los eventuales han perdido el empleo y el parón de la planta en los dos últimos meses va a generar un problema para compañeros de muchas contratas a los que sus empresas no les van a complementar el sueldo como a nosotros", afirman trabajadores de Arcelor.

Los mismos trabajadores que recuerdan que otras dos grandes compañías vecinas, La Naval de Sestao y Babcock, también van a tener compañeros cobrando sin trabajar, en este caso gracias a las prejubilaciones que arrancaron en su día al sector público español, a la Sepi. "En La Naval más de un centenar de compañeros se van a poder prejubilar gracias a los acuerdos de privatización en vez se ser despedidos sin más en el ERE y en la balco, igual. Pero los trabajadores de las pequeñas empresas que se mueven en torno a las nuestras lo tienen peor pues normalmente no disponen de esas coberturas".

Hay que tener en cuenta que compañías como la Acería de Sestao generan numerosos empleos indirectos con su actividad. "A tope de trabajo ACB puede producir cerca de 1,8 millones de toneladas de acero con las dos líneas". Un parón de dos meses puede suponer unas 160.000 toneladas menos de producción. Ello equivale a menos trabajo en el Puerto de Bilbao pues la acería fabrica acero en hornos eléctricos alimentados con chatarra y prerreducidos que llegan en un 70% por barco, pero también para los transportistas, el 25% llega en camión, y el 5% restante por ferrocarril. Además, la inactividad de la acería, que es capaz de elaborar una bobina de acero 30 toneladas de peso en menos de tres horas, supone menos trabajo para las empresas auxiliares que se encargan de labores como mantenimiento y demás.

Y lo que es más grave la decisión de Arcelor, una compañía con presencia en todo el mundo, muestra que las perspectivas económica de cara al último trimestre en Europa occidental distan de ser buenas.