Bilbao. El Consejo Económico y Social español, el CES, calcula que habría que crear 3,5 millones de empleos en al menos diez años para que la tasa de desempleo pase de los niveles actuales en el Estado -por encima del 20%-, a las cifras anteriores a la crisis. En el cuarto trimestre de 2007, se situó en el 8,6%.
El objetivo será "muy difícil" de alcanzar, según explicó ayer Marcos Peña, presidente de la institución, ya que, para poder generar empleo suficiente será preciso que el PIB aumente a tasas superiores al 2% al año, incluso al 2,5%, por encima de las propias estimaciones del Ejecutivo, que habla de un crecimiento del 2% para lograrlo. Mientras el Gobierno español espera crear empleo neto en el segundo semestre de este -con un crecimiento estimado del 1,3%- el CES afirma que pensar en generar suficientes puestos de trabajo con un avance del PIB inferior al 1,5% es "poco razonable". Por el momento, estima que "la mejoría de la economía es imperceptible y está sometida a riesgos".
Aunque Peña auguró que en 2011 no se destruirá empleo en España, insistió en que la tarea para recuperarlo es "de tal magnitud" que "el país" debe dedicarse a ello de forma "exclusiva". Por ello, pidió unión y colaboración a las instituciones, llamando la atención al Gobierno. Según dijo, si bien "la línea de ajuste no es reversible", la situación exige "una gobernanza más comprometida con la ciudadanía" y "más entendimiento político", porque "el crédito institucional es mejorable". Peña añadió que "el vaso está completo y ya no cabe una gota más, la sensibilidad de la ciudadanía está saturada". El CES también pide que se preste "más atención" y se "proteja" a autónomos y pequeños y medianos empresarios.