Qué mejor lugar para acoger el Campeonato del Mundo de sokatira sobre tierra que Bizkaia. Qué mejor lugar para realizar el primer Mundial en pandemia que Getxo. Así, las instalaciones deportivas de Fadura serán las encargadas de albergar del 16 al 19 de septiembre una competición en la que tomarán parte 39 clubes, 73 equipos, 50 jueces, 16 selecciones y 580 tiradores. Y debían de ser más. Pero, tal y como explica la organización, las restricciones de movilidad y los protocolos sanitarios han obligado a retirarse a muchos conjuntos nacionales. De hecho, el covid-19 lleva trastocando los planes de este campeonato desde el año pasado. Es más, estaba previsto celebrar el Mundial en 2020, pero el azote de la pandemia obligó a retrasarlo; por eso, ahora, a pesar de las ausencias, la organización festeja su disputa, aunque sea en tan solo ocho categorías, divididas según pesaje y sexo. De esta forma, durante las dos primeras jornadas -los días 16 y 17- tendrá lugar el Mundial por clubes, mientras que en las dos últimas -18 y 19- será el turno de las selecciones nacionales. Sudáfrica, Inglaterra, China Taipéi€ competirán por unas txapelas a las que también aspira Euskal Herria. Bajo la denominación de Basque Country, los tiradores vascos lucharán contra 15 combinados para que el Mundial se quede en casa. "Todos nos congratulamos de que este Mundial se dispute en Euskadi, pero es que además lo vamos a disputar con nuestra propia selección. Cosa que nos llena de orgullo. La sokatira es una de las primeras disciplinas en las que logramos este reconocimiento, después han venido otros deportes y aspiramos a que el camino que la sokatira comenzó sea una referencia para otras modalidades", dijo Bingen Zupiria, consejero de Cultura y Política Lingüística del Gobierno vasco.
El mismo discurso siguió Lorea Bilbao, diputada de Euskera, Cultura y Deporte, para quien la designación de Getxo como sede de este Mundial supone la "culminación de un arduo y tenaz esfuerzo del mundo de la sokatira para lograr la oficialidad de la selección y competir en un contexto internacional con nuestros colores y nuestra identidad". Y es que, como explicó Igor Duñabeitia, presidente de la Federación Vasca de Herri Kirolak, desde que en 2014 la Federación Internacional de Tug of War (sokatira en inglés) aceptó como miembro de pleno derecho a Basque Country, la selección vasca ha competido en diferentes torneos internacionales. Así pues, la primera vez fue en ese mismo 2014, en el Mundial de sokatira en tierra celebrado en Wisconsin (Estados Unidos); y la última, en 2018, en el campeonato de la misma modalidad celebrado en la localidad sudafricana de Ciudad del Cabo, donde el combinado vasco regresó con siete medallas. Por ello, el hecho de que apenas siete años después de entrar en la Federación Internacional de sokatira Basque Country acoja un Mundial como anfitrión supone la ocasión perfecta para reclamar la oficialidad de las selecciones vascas en todos los deportes. "Esta es una oportunidad de oro para reivindicar nuestra identidad mostrando la capacidad de la selección vasca para competir en un ámbito internacional en cualquier disciplina. Porque nos lo merecemos, porque no quitamos nada a nadie, al contrario, sumamos, aportamos y creamos un mundo más respetuoso y, sobre todo, un mundo mucho más real", concluyó Bilbao. En definitiva, el objetivo de los tiradores vasos es intentar dejar el nombre de Basque Country bien alto en las ocho categorías: 500 kilos y 540 kilos femenina; 560 kilos, 640 kilos, 680 kilos y 720 kilos masculina; 580 kilos mixta; y 600 kilos masculina sub'23.
Sin embargo, antes de que las selecciones nacionales deleiten al mundo, serán los clubes quienes pugnen por las txapelas. Así, un total de 39 confirmaron su asistencia, entre los que destacan los cuatro vascos: Goiherri, Getxo, Mutriku y Gaztedi. Entre todos darán lugar a 18 equipos, que competirán contra otros 55 para colgarse en oro en las 8 categorías diferentes. Es decir, habrá representación vasca en todas las pruebas por clubes. Además, cabe destacar que Goiherri y Gaztedi no solo acuden a este Mundial con la experiencia del haber disputado ya Sudáfrica 2018, sino también con el bagaje de haberse colgado cada club dos medallas en dicha cita: Goiherri, plata en la categoría de 560 kilos; y bronce en la cita masculina de 640 kilos; Gaztedi, plata para el equipo femenino en categoría de 540 kilos y bronce en la prueba de 560 kilos.
Público y protocolos
Duñabeitia hizo hincapié en los retos organizativos que suponen albergar un Mundial en pandemia. Así, el presidente de la Federación vasca de Herri Kirolak habló de las excepcionales e inusuales medidas de seguridad puestas en marcha: todos los participantes acudirán con la garantía de un PCR negativo a su llegada y, además, estarán reunidos en burbujas por equipos, que no tendrán contacto con el exterior y que minimizan el contacto entre ellas. Para ello, se han establecido métodos de control y protocolos para todos los aspectos relacionados, como el alojamiento, transporte y circulación por los espacios. Asimismo, Duñabeitia explicó que el aforo de las instalaciones de Fadura quedará limitado a 500 personas y que, para garantizarlo, las entradas se adquirirán mediante un sistema de reserva previo que permita gestionarlo.
Los datosFechas.
La competición por clubes tendrá lugar los días 16 y 17 de septiembre y el Mundial de selecciones, el 18 y 19.
16 selecciones nacionales. Además de Basque Country competirán Béglica, China Taipéi, República Checa, Inglaterra, Francia, Alemania, Israel, Italia, Letonia, Países Bajos, Polonia, Rusia, Sudáfrica, Suecia y Suiza.
4 equipos vascos. Goiherri, Mutriku, Getxo y Gaztedi son los cuatro clubes vascos, de los 39 en total, que pugnarán por las txapelas.
8 categorías. 500 y 540 kilos femenina, 560, 640, 680 y 720 kilos masculina, 580 kilos mixta y 600 kilos masculina sub'23 son las ocho categorías que componen el Mundial de Sokatira sobre tierra.
Aforo
500 aficionados podrán acudir a las instalaciones de Fadura para presenciar el Mundial. Las entradas se dividirán en jornada de mañana y jornada de tarde y podrán comprarse por un precio de cinco euros. La organización avisa que, para garantizar las medidas sanitarias, se adquirirán mediante un sistema de reserva previo.
