bilbao - Mario López (Gernika, 1967) sigue llevando a su club de toda la vida a las más altas cotas. Después de superar la fase de grupos de la Eurocup o igualar el récord de victorias en la liga, la segunda presencia en la Copa plantea un nuevo reto para un equipo que acumula ya 31 partidos oficiales esta temporada.

¿Cómo llega el Lointek Gernika Bizkaia a la Copa?

-Espero que bien. Estamos buscando que la adaptación de las últimas incorporaciones sea lo más rápida posible. Y los dos últimos resultados positivos nos han dado un plus de confianza, aunque estamos en el camino de intentar recuperar la solidez.

La ilusión es grande en todo el club y en el equipo.

-Sí. Tenemos jugadoras que ya han vivido la Copa y están tratando de impregnar a las demás de lo que supone y hacerlas ver lo que se pueden encontrar. Las jugadoras están mentalizadas de competir el primer partido. Por respeto al rival o a nosotras mismas, solo deberíamos hablar del IDK Gipuzkoa. Vamos con los pies en el suelo, con humildad, pero con ganas de competir al máximo y el deseo de hacer una buena Copa y esperamos que la afición nos impulse con su ilusión.

El IDK Gipuzkoa siempre es un rival incómodo.

-Sí, lo sabemos. Hemos logrado buenos resultados ante ellas, aunque en el último en el Gasca perdimos en la última jugada después de ir 32 minutos con ventaja. Pero en la Copa los partidos son diferentes, se juega en campo neutral, con las aficiones volcadas y hay que gestionar muchas emociones. Espero, por eso, un partido igualado en el que tenemos que jugar con mucho ritmo y sin dejarnos nada, insisto, porque si no ganamos, no habrá más Copa.

¿Qué es lo que más destaca del equipo donostiarra?

-Tienen buenas individualidades como Weaver, Sarr o Brkic, que llevan el peso de la anotación. Pero su principal virtud es que son un bloque sólido. Varias jugadoras llevan muchos años jugando juntas y tienen muchos automatismo y mucho feeling entre ellas. Hacen un juego muy práctico y al margen de estas tres, las otras jugadoras también aportan muchas cosas para ser un equipo fuerte.

¿Por dónde puede ir el partido en lo táctico?

-Bueno, Azu Muguruza y yo nos conocemos muy bien, pero siempre hay que tener un plan B en este tipo de competiciones. Pero al IDK Gipuzkoa le gusta jugar partidos cerrados, a posesiones más largas, mientras que nosotras queremos anotar desde la defensa. Ellas tratarán de pararnos en los primeros segundos de ataque, que no anotemos rápido, y querrán llevar el ritmo. Nosotras buscaremos ir a un marcador más alto.

El Lointek Gernika lleva una temporada de mucho desgaste. Sin embargo, ¿esa exigencia que ha tenido le puede ayudar en la Copa?

-Sí, creo que haber jugado muchos partidos comprometidos nos tiene que servir de experiencia, por supuesto. Tenemos jugadoras expertas también, pero estos partidos tan especiales nunca sabes cómo van a salir. Hay muchos detalles que pueden surgir, por eso espero que todo lo que hemos vivido este año nos ayude a competir al mejor nivel.

Desde el punto de vista de entrenador, ¿es una de las temporadas más satisfactorias? Casi siempre el equipo ha mantenido un nivel muy alto.

-En cuanto al juego, sí puede ser la temporada con la que estoy más contento porque hemos logrado lo que veníamos buscando y que en las dos últimas temporadas no habíamos conseguido, que es defender con intensidad, jugar transiciones rápidas? Estoy muy contento y en cuanto a la clasificación también. Ya tuvimos un año que quedamos terceras con 16 victorias, pero estaba más barata. Este año con 16 victorias quizás no acabes ni cuarto. Por eso creo que pese a los últimos cambios está siendo una grandísima temporada.

Desde las Navidades el equipo ha tenido que reinventarse.

-Sí, pero es algo que nos viene pasando en los últimos años. Ya tenemos un par de másteres hechos. Hemos intentado buscar soluciones rápidas y creo que las nuevas jugadoras nos pueden ayudar en el final de temporada, aunque quizás hemos perdido algo de físico y de rebote.

Este año el club ha podido acceder a jugadoras con marchamo WNBA. Eso también es un buen síntoma.

-Bueno, tampoco hay que confundirse. Dietrick es una jugadora que juega en la WNBA un minuto cada dos o tres partidos y que ni siquiera entró en el draft. Aunque por su trabajo, humildad, ética y compromiso está al nivel de cualquiera de ese nivel. Gwathmey fue cortada este año y no sabemos si volverá a entrar en la WNBA. Y en el caso de Banham y ahora Williams sí son jugadoras de ese nivel. Rachael estaba sin equipo y a Courtney hemos podido ficharla más barato de lo que son sus cifras habituales después de que saliera de Italia y, aunque no ocupe la misma posición que Gwathmey, era una oportunidad que no podíamos dejar escapar.

Precisamente, cuando todo está enfocado a la Copa hay que acoplarla. Supongo que no es lo ideal.

-Vamos a marchas forzadas. Meter ahora a una jugadora que acaba de llegar y no conoce a nadie más que a Banham es complicado, pero vamos a intentarlo. Ella es una buena jugadora y así será más fácil. Creo que vamos a poder ver un buen nivel de Courtney en la Copa.

Además, ese factor sorpresa siempre puede ayudar a ganar.

-Nunca sabes. A veces, ese aire fresco que entra en el equipo hace que este se vuelva más dinámico y en nuestro caso nos puede ayudar a recuperar la chispa que habíamos perdido con tanto cambio. Y también nos puede ayudar mentalmente.

Y tras la Copa, llegará el objetivo de asegurar el factor cancha en el ‘play-off’, algo que tampoco será sencillo.

-Tenemos dos partidos de ventaja con el Cadi y el Valencia, pero aún debemos jugar contra el Avenida y el Girona por lo que tenemos que pensar que vamos igualadas y que estamos cuartas porque tenemos el average perdido con el Cadi. Ellas tienen que enfrentarse entre sí, pero si perdemos con los dos grandes vamos a tener que ganar los otros tres partidos para quedar entre los cuatro primeros. Hasta el último partido vamos a tener que pelear y tampoco es lo mismo ser tercero que cuarto.

“Espero un partido muy igualado, como siempre, ante el IDK Gipuzkoa en el que habrá que gestionar muchas emociones”