Jon Rahm regresa esta semana al escenario donde protagonizó en 2020 uno de los episodios más brillantes de su carrera. El Olympia Fields de las afueras de Chicago acoge desde hoy el BMW Championship, segundo playoff de la FedEx Cup, un torneo que el golfista de Barrika se llevó en ese año en un desempate inolvidable con Dustin Johnson, resuelto en un duelo de putts imposibles de larguísima distancia que, en el caso de Rahm, quedan por su ejecución y por su trascendencia entre los mejores golpes de su carrera.

Cuatro golpes bajo par fue el registro ganador entonces en un campo muy complicado, que solo permitió a cinco jugadores acabar bajo par. Ahora se espera un recorrido más amable, sobre todo en los greenes. En todo caso, Rahm también aprecia diferencias notables ya que “en 2020 estábamos en pandemia y no había público. Esos putts que metimos Dustin y yo se recibieron en silencio”, recordó en la rueda de prensa previa. Además, el barrikoztarra piensa que ahora es “mejor jugador y mi vida también ha cambiado y mejorado mucho fuera del campo”.

Esa mejoría le ha llevado a llegar este año a Olympia Fields como líder de la FedEx Cup y con el claro objetivo de defender esa posición antes del Tour Championship de la semana que viene. Sus cuatro victorias le impulsaron en un gran comienzo de año “y espero terminarlo de la misma manera. Estoy en buena posición, pero hay que rematar el trabajo y espero jugar estas dos semanas lo suficientemente bien para conseguirlo”. Los mejores cincuenta jugadores de la temporada buscan un triunfo de prestigio y el rival más cercano de Jon Rahm es Scottie Scheffler, con el que compartirá partido hoy y mañana en busca de los puntos necesarios para defender un liderato que ahora puede estar al alcance de muchos jugadores a poco que puedan engarzar una buena semana. Defiende el título Patrick Cantlay, que podría lograr el hito de llevarse el torneo tres años seguidos en campos distintos.

El calendario de Rahm no acaba con el final de la temporada en el PGA Tour ya que aún le quedarán citas muy importantes en Europa. En este sentido, también se pronunció sobre los planes del golf mundial en el futuro y, “aunque esta es la vida que hemos elegido”, mostró su confianza en que esos 22 o 23 torneos que disputa cada año puedan encajarse de manera que “podamos encontrar en octubre, noviembre y diciembre un periodo sin competición como tienen otros deportes y pueda estar en casa para poder ejercer de padre”.

Apoyo a Hawái

El curso de Jon Rahm arrancó con una gran victoria en el Sentry Tournament de Kapalua, que se juega en la hawaiana isla de Maui, parte de cuyo territorio, en concreto la ciudad de Lahaina, fue arrasado la semana pasada por un devastador incendio. El barrikoztarra mandó sus condolencias a todas las víctimas y su apoyo a su compañero californiano Collin Morikawa, con antepasados y familia en Lahaina que ha podido quedar a salvo, aunque hayan perdido sus negocios y sus propiedades. Jon Rahm deseó que puede reconstruirse todo lo perdido “lo antes posible, especialmente pensando en una cultura que se preocupada tanto de su territorio como lo hacen los hawaianos”. l