Ivan Buva, el anotador de medio partido
el pívot croata exhibe unos números muy destacados dentro de la liga y justifican su fichaje por el bilbao basket
IVAN Buva se va haciendo cada vez más necesario en el RETAbet Bilbao Basket. Por más que en el baloncesto actual prime la búsqueda de espacios y el juego de cara al aro, cualquier equipo desea tener un vértice en el poste bajo, una referencia interior que pueda resolver algunos problemas. El pívot croata cumple perfectamente con ese cometido en un conjunto como el bilbaino que desde el inicio de temporada ha mostrado un perfil abiertamente ofensivo.
Los defectos de Buva se concentran en la parcela defensiva, lo que hace que se lleve las reprimendas de su entrenador y algunos compañeros, generalmente por errores de posicionamiento en la cancha, y también en un umbral de sufrimiento bastante bajo, que le ha hecho perderse bastantes entrenamientos y llegar mermado a varios partidos.
Posiblemente, esto pesa en el balance a la hora de la utilización que Carles Duran hace de Buva. Porque, salvo en el primer partido de Liga ante el Fuenlabrada, el jugador de Zagreb nunca ha estado en cancha más de 23 minutos, incluyendo los siete choques de la Eurocup. Todo lo que hace lo hace en medio partido y salvo en tres encuentros, saliendo desde el banquillo. Cuando ha estado disponible Micheal Eric casi se han repartido a partes iguales la posición de cinco, con algunos partidos en los que han coincidido en breves periodos. Pero en los recientes encuentros en que ha faltado el nigeriano, tampoco Ivan Buva ha visto incrementada su presencia en cancha. Duran prefiere mantenerle como foco anotador de lo que se llama segunda unidad antes que aumentar sus minutos, algo que quizás podría mermar su rendimiento al obligarle a esfuerzos más continuados.
En todo caso, los números del croata confirman su condición de pieza importante en este Bilbao Basket. Sus 11,6 puntos de media solo son superados por cuatro pivots de la Liga Endesa: Ante Tomic, Giorgi Shermadini, Dejan Musli y Bojan Dubljevic, todos ellos en equipos que están entre los ocho primeros. Ivan Buva añade, además, 5,3 rebotes y un total de 12,5 de valoración para completar con Mumbrú y Bamforth un triángulo que asume mucho protagonismo en los ataques del Bilbao Basket. Esta aportación es muy destacada para solo 20 minutos e imita lo que el balcánico hacía la pasada temporada en el Avellino italiano y que fue una de las razones principales para que el club vizcaino lo fichara.
No hay que engañarse: Ivan Buva quiere el balón para anotar. Aún no ha desarrollado una capacidad de pase que le permita generar juego desde su posición, lo que a ojos del público le puede situar como un tipo egoísta. Sin embargo, para su perfil como jugador cuenta con recursos evidentes y que no todos los pívots dominan, por lo que está bien que los despliegue. Usa las dos manos, tiene un buen rango de tiro y mete los tiros libres. Sus porcentajes de 60% en tiros de dos, 35% en triples y 74% en tiros libres, que han sido todavía mejores en los partidos de la Eurocup, solo pueden ser comparados en estos años recientes del Bilbao Basket con los de Lamont Hamilton y Germán Gabriel, jugador este de un estilo muy similar a Buva.
El estadounidense acabó su única campaña en el equipo con 56%, 56% y 75%, respectivamente, y el malagueño, con 53%, 35% y 85% en su último curso entero en Bilbao. Y a los dos, también, se les afeaban sus lagunas defensivas, razón por la que fueron hombres de negro y no pertenecieron a la superélite.
Marko Todorovic, en su primer ejercicio en el equipo, fue también un jugador muy productivo en la posición de cinco a las órdenes de Sito Alonso. El montenegrino promedió 11,4 puntos y 7,2 rebotes y fue elegido en el mejor quinteto de la temporada, pero a diferencia de Buva jugaba siete minutos más por partido y no tiraba de tres. La pareja que Todorovic formaba con Latavious Williams fue una de las razones de aquella gran campaña del Bilbao Basket. Entre los dos, aportaron 18,5 puntos, con un 65% de acierto en tiros de dos, y 12,9 rebotes por partido.
notable pareja Pues bien, el dúo Buva-Eric tiene una producción aún mayor esta temporada. La suma del croata y el nigeriano, con el tiempo repartido casi equitativamente, aporta 20,9 puntos y 11,4 rebotes, con los dos anotando por encima del 60% en tiros de dos puntos de distinta manera: uno con tiros cortos, el otro con mates casi siempre. Para un equipo de media tabla, como es ahora mismo el Bilbao Basket, la suma de ambos se antoja casi como un lujo ya que no muchos disponen de una amenaza constante en la pintura. Hoy Buva y Eric tendrán una nueva prueba de fuego ante el Barcelona que, precisamente, para reforzar su juego interior ha debilitado a dos rivales directos de los hombres de negro. Vitor Faverani, fichado del UCAM Murcia, y Moussa Diagné, del Fuenlabrada, respaldarán a Tomic en el equipo culé. Y es que, por más que en el baloncesto moderno ahora marquen la pauta los bajitos, a nadie le amarga un buen pívot. Menos aún si son dos. En la comparación con muchos equipos de la Liga Endesa, el Bilbao Basket no sale mal parado en la presente temporada y debería explotarlo más a menudo.