El Bilbao Athletic desperdicia su ventaja y pierde ante el Elche
Por culpa de dos goles a balón parado que castigan sus buenas intenciones
ELCHE: Javi Jiménez, Miguel Ángel, Hugo Álvarez, Armando, Álex Martínez, Álvaro, Lolo, Pelayo (Min. 48, Nono), Álex Moreno, Sergio León (Min. 76, Anaba) y Héctor (Min. 54, Espinosa).
BILBAO ATHLETIC: Remiro, Iru, Óscar Gil, Yeray, Iriondo, Vesga, Undaberrena (Min. 85, Guarrotxena), Unai López, Iturraspe (Min. 59, Oteo), Seguín y Santamaría (Min. 72, Villalibre).
Goles: 0-1: Min. 61; Unai López. 1-1: Min. 63; Armando. 2-1: Min 71; Sergio León.
Árbitro: Figueroa Vázquez (colegio andaluz). Mostró tarjetas amarillas a Hugo Álvarez, Álex Martínez, Álex Moreno, Yeray, Iriondo y Oteo.
Incidencias: 10.209 espectadores en el estadio Martínez Valero de Elche.
bilbao - Dicen que la juventud es un defecto que se cura con los años, pero el Bilbao Athletic va a tener que acelerar los plazos para parecer un equipo veterano. Los chavales no fueron inferiores ayer en fútbol y en personalidad al Elche, como no lo fueron ante el Girona en su estreno en la Liga Adelante, pero sí lo fueron en oficio, en conocimiento del medio, en esas cosas que, efectivamente, solo se pueden aprender con el paso del tiempo. Tampoco fueron superiores en suerte, aunque eso ya no lo pueden controlar.
Desde el primer minuto, el Bilbao Athletic quiso tener el balón y lo logró durante la mayor parte del tiempo ante un rival que esperaba bien agazapado en su campo sin arriesgar demasiado. Los de Rubén Baraja, lógicamente, empujaron gracias a que el filial rojiblanco no lograba finalizar sus jugadas. Unai López quedó recluido en la banda con la entrada de Iturraspe como titular y apenas pudo participar. Las incursiones de Seguín por la izquierda no tuvieron éxito y los ilicitanos aprovecharon esas imprecisiones para generar peligro, aunque sin que Remiro tuviera que intervenir, en el tramo central de la primera mitad.
Sergio León, un cabezazo de Hugo Álvarez a la salida de un córner y otro remate del hábil Álex Moreno sembraron cierta inquietud en la zaga del Bilbao Athletic, que parecía respetar demasiado a un rival que fue de Primera División la pasada temporada y pecaba de falta de atrevimiento en situaciones ventajosas. Pero esa tónica cambió al inicio de la segunda mitad.
Santamaría, de nuevo muy laborioso, e Iturraspe no pudieron concretar sendas llegadas al área de Javi Jiménez, pero esas dos jugadas entregaron el protagonismo del partido al filial, que pudo adelantarse si el meta ilicitano no hubiera realizado un paradón en un lanzamiento de falta de Seguín que buscaba la escuadra izquierda.
Poco después, Ziganda metió a Iurgi por Iturraspe lo que devolvió a Unai López a su posición natural. Y no tardó en notarse la bondad del cambio. El donostiarra apareció libre de marca en el área pequeña para fusilar un centro de Seguín tras una jugada de manual. El resultado, ahora sí, premiaba las intenciones del Bilbao Athletic y su manejo del partido. Pero los pecados de juventud se manifestaron pronto para compensar y provocar un castigo excesivo. Apenas dos minutos después, el Elche botó un saque de esquina y en el barullo de seis jugadores el balón cayó por azar a pies de Armando que solo tuvo que enviarlo a la red de un confundido Remiro.
Duro golpe
Este gol, surgido de la nada, lleva unos minutos de tregua al Martínez Valero y el escenario del choque cambió bruscamente en el minuto 71. El árbitro señaló una falta inexistente de Iriondo sobre Espinosa que permitió al Elche adelantarse tras una jugada perfectamente ejecutada en la que Sergio León pilló desprevenida a la defensa bilbaina para fusilar a Remiro.
Sin merecerlo, el Bilbao Athletic se vio por detrás en el marcador ante un rival que empezó a acusar el desgaste físico. Los jóvenes rojiblancos reaccionaron al gol con tres llegadas que no supieron convertir y no cejaron en el empeño de recuperar, al menos, un punto. Lo tuvo Jon Iru, pero su remate desde dentro del área se topó con las manos de un bien colocado Javi Jiménez que evitó el gol.
No fue por no insistir porque el encuentro murió con el balón rondando el área del Elche y dos saques de esquina seguidos que el Bilbao Athletic no aprovechó. Después de dos partidos, el equipo de Cuco Ziganda tiene cero puntos en su casillero después de encajar un gol en fuera de juego y dos en jugadas a balón parado, perfectamente evitables. A este nivel, no solo vale con jugar muy bien al fútbol. Se necesita algunas herramientas que el Bilbao Athletic va a tener que añadir a su mochila para compensar el lastre de la juventud.