bilbao - El Bilbao Basket sufrió en Murcia un extravío de su ruta habitual de esta temporada. Disparar las alarmas no procede por cuanto la derrota ante el UCAM no marca ninguna tendencia, ni define la trayectoria reciente del equipo de Sito Alonso que la semana anterior se había impuesto brillantemente al Laboral Kutxa. Pese a lo que pueda parecer, el Bilbao Basket sigue siendo uno de los mejores equipos de la segunda vuelta con cuatro victorias y dos derrotas. Solo el Real Madrid, que está imbatido, y el Unicaja, que perdió ante el Manresa, presentan mejor balance en las seis últimas jornadas.
Con el objetivo de intentar acabar la temporada en la cuarta o quinta plaza, los hombres de negro han conseguido en este mes y medio aumentar la distancia con todos sus perseguidores, excepto el Laboral Kutxa y el Iberostar Tenerife. Y el Bilbao Basket sigue siendo junto al Unicaja el único equipo que aún no ha perdido dos partidos de forma consecutiva. De mantener esta dinámica, resulta imposible que los bilbainos vayan a ceder muchas posiciones en la tabla.
Los próximos partidos marcarán si lo que se vio en Murcia es solo un accidente en relación al nivel actual del equipo. Las consecuencias del derbi ante el Laboral Kutxa aún están por conocerse, lo mismo que la evolución de la lesión de Latavious Williams. Lo más preocupante sigue siendo que algunos jugadores siguen sin aportar de la manera que se esperaba de ellos y eso deja al Bilbao Basket en manos de un grupo limitado de hombres. Cuando solo unos pocos funcionan, como ante el UCAM, puede suceder lo que sucedió este pasado domingo.
Por más que se desee, tener toda la plantilla en perfecto estado parece imposible y en esa capacidad de crecimiento del equipo está la clave de esta fase del curso. Una jornada como la última en la que han perdido cinco de los seis primeros y solo ha habido dos apretados triunfos fuera de casa avisa a todos de que cualquier descuido se paga. Incluso si el que lo protagoniza es el Bilbao Basket.