Pereda, un bronce con futuro de oro

bilbao. Apostaron fuerte desde la Federación Española de Kárate por Xabier Pereda aunque las cosas no pintaban nada bien en septiembre. El karateka getxoztarra cadete, de 14 años, estaba recuperándose de una rotura en la placa del crecimiento de la tibia y "lo tuvimos complicado pero decidimos apostar por él de cara al Mundial de kárate que disputamos el 9 de noviembre en Guadalajara", relata Asier Elordui, entrenador personal de la joven perla de Eskuinaldea -además es su primo-, subdirector técnico de la Estatal y seleccionador. Pereda se lesionó el 28 de abril y las primeras siete semanas anduvo con escayola, los dos meses siguientes fueron de trabajo en piscina: "Hacía todo en la piscina, desde los katas hasta las sentadillas. Trabajó un montón". Ya en verano, Xabier empezó con las dobles sesiones y la cosa se puso un poco más cuesta arriba. "En septiembre teníamos que hacer la preselección y él pensaba que no llegaba", concreta el técnico. "Le concienciamos y le pusimos claro que se podía hacer. Había mucho trabajo de cabeza", confirma. Apostaron. Y acertaron. "El tiempo nos dio la razón", analiza. Así fue. En el Mundial de kárate, Xabier Pereda se llevó el bronce en categoría cadete de la modalidad de kata compitiendo con "chavales que le superan en casi dos años". El getxoztarra, de 14 años, se mide a "karatekas que están a puntito de cumplir 16".

"Para nosotros fue una sorpresa a medias", afirma Elordui, quien agrega que "todos sabíamos que era posible conseguir estos resultados, porque Xabier es un chaval con unas cualidades como no habíamos visto en mucho tiempo. Eso sí, la sorpresa puede venir por cómo siendo el más joven ha sido capaz de derrotar a gente con un desarrollo muscular superior, porque entre los 14 y los 16 se pueden observar unas diferencias muy importantes". De este modo, el joven de Getxo pugnó con "adversarios que en algunos casos pesaban hasta veinte kilos más que Xabi".

Primero derrotó al representante de Bosnia Herzegovina, después al de Croacia, en el tercer enfrentamiento a Panamá; sin embargo, en su cuarta eliminatoria, contra el karateka de Turquía, Pereda hincó la rodilla. Aun así, puesto que el turco llegó a la final de la competición, "sus rivales tenían derecho a repesca". Entonces no falló: ganó a Argelia e Indonesia; y se colocó en el tercer escalón del podio.

Relata Asier Elordui que "una de las cosas que más sorprende de Xabier es que es muy maduro para su edad. En el futuro se verá a lo que puede aspirar, pero actualmente es la mayor baza a nivel de Mundiales y tiene una proyección que la gente que estamos en la Federación no hemos conocido y eso que ha habido campeones del mundo. Cumple con todos los requisitos para seguir hacia adelante haciendo cosas importantes". El karateka, que se faja en la Escuela de Defensa Personal Isan de Getxo, en la que es considerado "un buque insignia para los próximos años".