Euforia domesticada

Para los aficionados al remo, después de la temporada monótona y sin emoción a la que les condenó Castro el año pasado, la llegada de otra trainera con hambre de triunfos ha sido toda una sorpresa. Y más que aparezca una capaz de ganar en las dos primeras jornadas de manera consecutiva. Pero la superioridad que ha exhibido Orio este fin de semana ha preocupado un poco. ¿Será posible que lo único que haya cambiado sea el color de la embarcación que gana las regatas? Si uno busca la respuesta en las palabras de los propios oriotarras puede sacar la conclusión de que no, que esta Liga tendrá más salsa, ya que ellos mismos están sorprendidos de la velocidad que ha sido capaz de alcanzar la Mirotza. Con las emociones del domingo ya bien metabolizadas, Joxean Olaskoaga, hacía un análisis "muy positivo" de lo acontecido. Reconoce que tener un fin de semana mejor es imposible y que, aunque no esperaban esos resultados, "han venido bien y se agradecen".

De todos modos, que una trainera comience la Liga ganando las dos primeras regatas no es algo nuevo. A pesar de que la Liga San Miguel tiene una vida corta, esta es la octava edición que se celebra, ya ha visto en cuatro ediciones cómo un mismo club se llevaba a sus vitrinas las dos primeras banderas que se ponían en liza. Curiosamente, con la hombrada de esta semana, el club amarillo es el único que ha conseguido sorprender con un inicio así en dos ocasiones. En la temporada de 2007, la trainera entrenada por Aizperro venció de manera consecutiva en aguas de Pontevedra y A Coruña, encaramándose también al liderato. Para Olaskoaga este equipo se parece mucho a aquel de hace tres temporadas y encuentra algunos paralelismos: "Esta siendo muy similar. Igual ahora lo llevamos con más veteranía. Ahora, como entonces, hay muchos jóvenes en la tripulación. Es bastante similar, incluso la remada. Hemos cambiado poco, apurando se van limando cositas pero es un equipo muy parecido a aquél. Estamos sorprendidos. El sábado incluso marcamos un tiempo récord y nos quedamos nosotros mismos impresionados".

Si algo aprendieron de aquel buen inicio es que empezar siendo los mejores no garantiza que se lleven el título de Liga. Urdaibai tuvo ese honor en 2007, relegándoles al segundo puesto. Eso hace que este año mantengan los pies en el suelo. "En 2007 ganamos buenas banderas y nos llevamos La Concha también. Creo que todo no se puede. Este año habrá que ver. Primero hay que aprovechar este tirón para ver si el fin de semana podemos ganar alguna bandera más y luego si podemos estar en la pelea por la Liga. Si estás en esa lucha las banderas caen. Orio todavía no tiene ninguna Liga y si tiene la oportunidad de ganarla debe intentarlo", explica el entrenador oriotarra. Y es que el objetivo, como todos los años en Orio, es ganar la Bandera de La Concha. Los amarillos sienten que tienen un gran margen de mejora para explotar durante la temporada y llegar en mejores condiciones a las regatas importantes de la segunda quincena de agosto y septiembre. Aizperro reconoce que estas regatas no las habían preparado para ganarlas: "Nuestro objetivo era estar en la pelea, pero parece que los adversario no están todavía muy finos y la balanza ha caído de nuestro favor. Todavía esto puede cambiar mucho, yo tengo los pies en el suelo porque esto acaba de empezar". Son las palabras de la veteranía, de quien ya ha visto muchas cosas en el remo y se puede permitir domesticar la euforia.

¿Y si se encuentran en septiembre con opciones de ganar la primera Liga San Miguel para Orio? ¿Sacrificarían la regata de La Concha? Olaskoaga duda. La Concha es sagrada para un oriotarra, pero sabe que la Liga la ganan los mejores: "No lo sé. Quizás si sacrificaría La Concha por la Liga. No es lo mismo ganar la Liga con catorce o quince banderas que sólo con las dos que ya tenemos y La Concha. También hay que valorar bastante más la Liga. Siempre estamos con La Concha y ganar la Liga es algo muy difícil. Hay que ser regular y La Concha es una sola regata que te puede salir bien o mal. Es una apuesta muy fuerte. Si se apuesta toda la temporada a una regata te puede salir mal".

Si sorprende el rendimiento de la Miotza, a nadie le parecerá una novedad que la tripulación de Orio estuviese formada al cien por cien por remeros propios. Verse vencedor con toda una tripulación de casa es una sensación especial: "Ha sido con chavales jóvenes que vienen de la cantera, que han sufrido mucho para llegar ahí y ganarse el puesto. Es un orgullo para uno de Orio verles las caras que tenían de satisfacción y de orgullo nada más terminar. Es lo máximo que puede haber en el remo". Ahora queda la incógnita de ver hasta cuándo podrán prolongar su racha. Sólo Hondarribia, en 2006, ha sido capaz de debutar ganando las tres primeras banderas.