Los Delinqüentes actuarán en el CUBEC! el 22 de mayo de 2026

Irreverentes, festivos, fumetas y mestizos. Así eran Los Delinqüentes, un trío de andaluces que fusionaron su flamenco con otras músicas hedonistas y que ahora, década y media después, regresan para ofrecer una gira en homenaje a Er Migue, su miembro fallecido.Uno de los conciertos tendrá lugar en el espacio CUBEC! del BEC de Barakaldo, el 22 de mayo de 2026.

“Nunca lloro porque vivo en Carnavales”, cantaban el El aire de la calle estos calaveras que debutaron en 2001 con el disco El sentimiento garrapatero que nos traen las flores influenciados por Veneno y que dejaron himnos festivos como el citado, La primavera trompetera, Nube de pegatina, A la luz del Lorenzo o De los matorrales. Formados por Er Migue, El Canijo de Jerez y Diego ‘Ratón’, acaban de anunciar en una rueda de prensa en Madrid la realización de una gira en 2026 para celebrar el 25º aniversario de su debut.

La gira histórica tendrá paradas en Barcelona, Valencia, Madrid, Bilbao, Zaragoza, Murcia, Sevilla, Cádiz y Fuengirola, tras agotar entradas en Madrid, el primero de los conciertos anunciados. La entradas saldrán a venta el viernes 5 de diciembre, a las 11.00 horas, en las páginas web de la promotora vizcaina Last Tour y la del propio grupo, que surgió en Jerez de la Frontera y fusionó con éxito el flamenco con el rock, el blues, el reggae y el funk.

El grupo vuelve a los escenarios tras casi 15 años de ausencia con una gira que recorrerá gran parte del Estado para celebrar su debut, una obra esencial de la música popular contemporánea estatal. El grupo interpretará el álbum al completo junto a muchos de los himnos que marcaron una época. La gira arrancará en el Palau Sant Jordi de Barcelona el 10 de abril y concluirá en Fuengirola el 25 de julio.

Recuerdo a Er Migue

Sus compañeros supervivientes, que protagonizan sendas carreras discográficas con éxito, han confirmado que la figura de Er Migue estará muy presente en esta gira única: su imagen y voz se proyectarán en una pantalla gigante sobre el escenario, cantando en sincronía con el resto de la banda. Una forma emocionante de rendir homenaje a quien fue el motor creativo y espiritual de la formación, reconocen sus compañeros.