Ya no actúan en su escenario estrellas internacionales, como en su día hicieron Robbie Williams y The Corss, debido a la existencia de otro tipo de equipamientos públicos y privados en la villa, pero Bilborock sigue siendo “una gran sala polivalente” abierta a la comunidad y a sus inquietudes artísticas, caso de proyectos recientes como Freskure, Gazte Egunak o Femme Bilbao. Su actualidad e historia se ve reflejada en el documental Bilborock, mucho más que rock, dirigido por Álvaro Fierro y Diego Urruchi, que repasa los 25 años de historia de este equipamiento municipal. “Es modelo del Bilbao que queremos, joven, dinámico y actual”, según fuentes municipales.
En realidad, no son 25 años, sino 27, cuando Bilborock abrió sus puertas –el 9 de abril de 1997– en la antigua iglesia barroca de La Merced, levantada en los siglos XVII y XVIII en el corazón histórico de la ciudad. Bilborock, mucho más que rock, recupera numerosas imágenes de archivo e incorpora testimonios de medio centenar de personas vinculadas de una u otra forma al equipamiento. “Queríamos poner en valor al escenario y al talento que ha pasado por él”, según la productora ejecutiva del film, Paula Bañuelos.
El documental bilingüe, que cuenta con el apoyo de la Diputación Foral de Bizkaia y el Ayuntamiento de Bilbao y se proyectará gratuitamente este sábado en el propio equipamiento cultural antes de su llegada a Filmin el 12 de julio, es “un regalo”, según Itxaso Erroteta, Concejala de Juventud y Deporte, un “ejemplo de liturgia, fe y colaboración”, y, además, ejemplo de que “la cultura cambia y mejora la sociedad, influye en la forma en la que vemos el mundo y genera espíritu crítico”.
La edil destacó que Bilborock es, como se desprende de su título, “mucho más que una sala de conciertos”, y ha llegado a convertirse en “un espacio para la creación y difusión musical y cultural, en todo un centro de sinergias para la juventud”, su principal destinatario. Erroteta indicó que este “espacio social, cultural, artístico y pasional” es el reflejo y “modelo de la ciudad que queremos”, de un Bilbao “joven, dinámico y actual”, pero que no “desdeña su pasado”.
Liturgia y pasión
El documental, retrato de un Bilbao que se reinventaba hace 25 años como ciudad cultural y de servicios, parte de “la pasión y la liturgia” compartida por sus dos directores como “personas usuarias” de Bilborock, especialmente desde su uso como sede del Concurso Pop Rock Villa de Bilbao, y ha sido posible gracias al “archivo enorme y documentado” de la sala, junto al de Bilbao Histórico. En él, aparece parte del “muchísimo talento musical” que ha acogido, ya que la sala fue crucial para el éxito de bandas emergentes como Doctor Deseo, Capsula, Gatibu, Belako, Zodiac, Sidonie, La Buena Vida, El Columpio Asesino, WAS, Zea Mays, Deloreean, Su Ta Gar, The Sunday Drivers o Fito y sus Platero y Tú.
Los directores incidieron en que el objetivo de la película, en la que aparecen Afrika Bibang, Audience o El Inquilino Comunista junto al exalcalde Josu Ortundo o exedil Ricardo Barkala, era “poner en valor cómo la cultura ha cambiado la ciudad y cómo esta ha influido en la cultura”, según Urruchi. Por su parte, Fierro habló de “la pasión, la fe y la unión de barrios” germinada desde el equipamiento cultural, mientras que David Hono, músico que ganó el Villa en 2000, al frente de Ya Te Digo, lo calificó como “trampolín para las bandas noveles”. Finalmente, Lova Lois, finalista en 2023 del VillaSoundBilbao, calificó a la sala como “pasión, vida y unión”, además de “lugar importante para incentivar la creación”.

Balance Bilborock, como sala polivante, ha acogido más de 6.500 eventos –con un público de más de 1.300.000 personas–, de los cuales sólo un 35% han sido conciertos. Ha habido también cine, artes escénicas, producción audiovisual, moda, presentaciones, festivales, charlas... Además, tiene un espacio paralelo para actividades de pequeño formato y siete salas de ensayo para jóvenes bandas locales. Por estas últimas, con tecnología y equipos renovados hace sólo dos años, han pasado más de 300.000 personas usuarias.
Además, constantemente se abre a nuevas inquietudes y tendencias. En los últimos años ha impulsado el VillaSoundBilbao, que busca promocionar y profesionalizar a bandas y solistas locales de entre 16 y 30 años, promoviendo la participación de la mujer, el uso del euskera, la formación y el emprendimiento. A él se unen otros ciclos recientes como Freskure, Local Djs, Igandays, Gazte Egunak o Femme Bilbao, así como certámenes que tienen a Bilborock como sede, caso de Caostica, Zinegoak o el Villa de Bilbao.