Un cuento, que parece muy real, en el que la fragilidad femenina se convierte en fortaleza. Esta es la historia de Las chicas están bien, el debut en la dirección de la actriz y guionista Itsaso Arana que compite por el Globo de Cristal en el Festival de Karlovy Vary. La producción, estrenada el sábado en el festival checo, trata sobre una escritora y cuatro actrices que se van durante una semana de verano a una casa de pueblo para ensayar una obra de teatro.

La propia Arana es la dramaturga y sus actrices son las mismas que los personajes de la película, incluso conservan sus nombres: Bárbara Lennie, Irene Escolar, Itziar Manero y Helena Ezquerro. “Es que es un cuento muy real”, cuenta Arana tras el estreno del filme, rodado en solo 15 días y que compite con otras diez películas por el Globo de Cristal.

A través de conversaciones, carcajadas y llantos, las cinco amigas, con una complicidad real, invitan al espectador a unirse a sus dilemas y a dialogar sobre temas vitales complejos, pero “sin ponerse solemnes”.

Y entre humor, amistad y conversaciones sobre el amor, el deseo, la soledad o la muerte la película navega entre elementos del presente y del pasado para hacer una relectura de los cuentos: hay música de Bach, vestidos victorianos a medio poner, una verbena de pueblo, un príncipe despistado, un guisante que se esconde bajo el colchón y hasta un sapo. El estreno fue acogido por el público entre aplausos y vítores.