- Los dos eran exitosos ingenieros de Caminos y amantes del arte. Santiago Corral y José Entrecanales ejercieron su profesión a la vez que daban rienda suelta a su afición coleccionista, adquiriendo pinturas de sus paisajísticos preferidos, entre los que destacaban Aureliano de Beruete (Madrid, 1845-1912) y Darío de Regoyos (Ribadesella, Asturias, 1857-Barcelona, 1913). "Me rondaba la idea de organizar un duelo entre estos pintores cuando me llamaron María Corral y Juan Entrecanales, descendientes de estos grandes coleccionistas, y pusieron a disposición del Bellas Artes algunas de sus obras", desveló ayer Miguel Zugaza, direcotr del Museo de Bellas Artes de Bilbao. La exposición Beruete, Regoyos y el paisaje está compuesta por setenta cuadros, de los que el 90% pertenecen a fondos de las dos colecciones privadas. Son obras adquiridas por ambos ingenieros entre las décadas de 1940 y 1970, aunque algunos de ellas fueron donadas posteriormente a museos e instituciones como el Paisaje sobre la ría de Bilbao, de Regoyos, que forma parte de la colección del museo bilbaino.

"Mi padre era bilbaino y aunque no lo dejó escrito en ningún testamento, sabíamos que quería que este cuadro pasara a ser propiedad del museo", explicó Juan Entrecanales, presidente de honor de Acciona, para quien esta exposición es "como un homenaje. Además de que nuestros padres desarrollaron una carrera profesional con mucho éxito en ambos casos, tuvieron tiempo suficiente para hacer coleccionismo de arte a mitad del siglo pasado", aseguró.

"Fue un momento insólito para coleccionar arte. En nuestra casa teníamos casi mil obras, a las que mi padre había hecho hueco hasta en las puertas correderas para colgarlas", explicó María de Corral. "Supe que me iba a dedicar al arte después de que me llevara a París, cuando yo tenía 14 años, a ver una exposición de Picasso", confesó la crítica de arte.

Para Zugaza, "el interés de la exposición radica, por una parte, en la excelencia de las obras reunidas tanto por Entrecanales como por Corral a lo largo de los años, y por otra, por la destacada tenacidad de coleccionismo que demostraron para su tiempo, insólito en aquel periodo en España, por la obra de dos artistas fundamentales en la renovación de la pintura española entre finales del siglo XIX y principios del XX. Ambos artistas trazaron en sus trayectorias pictóricas caminos paralelos aunque diferentes, pero encarnando dos formas de pintura del cambio de siglo por un doble sendero de la modernización del paisaje español que tardó en reconocerse".

Además de las obras de Beruete y Regoyos, la exposición incluye también algunos cuadros de otros artistas coetáneos de los protagonistas, como Agustín Riancho, Francisco Gimeno, Santiago Rusiñol y Joaquín Sorolla, cuya obra también fue adquirida entre 1940 y 1970.

La exposición, que permanecerá en el museo hasta el 15 de junio, está comisariada por Javier Barón, jefe del Área de Conservación de Pintura del Siglo XIX del Museo del Prado. "Profesionalmente, estos dos coleccionistas, dedicados a una tarea que implicaba la transformación de las infraestructuras de un país atrasado en este aspecto, se interesaron también por la renovación pictórica que había tenido lugar en España medio siglo antes a través del género moderno por excelencia, el paisaje", explicó Barón.

El paseo está dividido en tres apartados. El recorrido comienza en la primera planta con pintores del norte, como Agustín Riancho y el asturiano Darío Regoyos; un segundo apartado dedicado a Beruete, el gran pintor de Castilla, y termina con una sala dedicada a los pintores mediterráneos, los catalanes Santiago Rusiñol, Francisco Gimeno y Joaquín Sorolla. De Darío de Regoyos, "enamorado del paisaje húmedo del País vasco", hay cuadros como El viaducto de Ormaiztegui, Playa de Ondarreta, Orduña en fiestas... De Beruete, que nunca expuso en vida, sus paisajes de ciudades como Toledo, donde acudía todos los octubres a pintar, de Segovia, Ávila, Cuenca y de la sierra de Guadarrama... Barón también destacó la importancia del paisaje en la obra de Sorolla, que adentra la pincelada larga y luminosa en el paisaje verde del Monte Urgull, en el rompeolas de Donostia o en las playas de Valencia.

Una visión desde ángulos opuestos. En el periodo que comprende la exposición, patrocinada por la Fundación José Entrecanales Ibarra, "el paisaje fue el cauce de modernidad por excelencia de la pintura, que en España se asoció a una nueva visión del país por los artistas del regeneracionismo, conscientes del valor histórico y cultural que implicaba", tal y como indicó Barón. Tanto Zugaza como Barón destacaron que Aureliano de Beruete y Darío de Regoyos fueron "los más radicales y relacionados con las modernas corrientes europeas, pero también quienes vieron en el paisaje una expresión de la riqueza del país aunque desde ángulos opuestos".

"Es un homenaje a nuestros padres, que además de una carrera exitosa, tuvieron pasión por el arte"

Hijo de José Entrecanales

"Mi padre tenía casi mil obras, algunas colgadas hasta en las puertas correderas de casa"

Hija de Santiago Corral

"Beruete y Regoyos fueron impresionistas que pintaron España desde ángulos opuestos"

Jefe de Conservación del Prado