bilbao - La mezzosoprano Ainhoa Zubillaga comenzó a cantar en la Coral San Ignacio de Donostia, su ciudad natal, y en 1987 ingresó en el Orfeón Donostiarra. Confiesa que la música le gustaba desde pequeña: “Mi aitatxu cogía la guitarra y solíamos cantar en todas las celebraciones, pero realmente fue con 15 años cuando decidí acercarme al Coro San Ignacio, del colegio de los Jesuitas, donde iban mis hermanos. Yo iba al colegio San Patricio, pero me presenté sola en el coro, diciendo que quería cantar”.

Luego la vida le fue metiendo poco a poco en el mundo de la lírica y descubrió que ésta era su verdadera vocación: “Del coro pasé al Orfeón Donostiarra; cuando tuve que realizar una prueba importante para ser orfeonista, fue cuando empecé a tomar las primeras clases de canto. Fue mi profesora quien me dijo que debería hacer estudios propiamente de canto. He ido siempre compaginando diferentes trabajos con el canto, porque yo en realidad, estudié Turismo en su día. Hasta que decidí volcarme exclusivamente en el mundo de la música hace ya unos 20 años”.

La mezzo vasca completó sus estudios de canto bajo la dirección de Edurne Aguirre y realizó estudios de perfeccionamiento en Holanda con Rita Adams y Diane Forlano. Desde entonces, Ainhoa Zubillaga ha actuado como solista ofreciendo conciertos y recitales en todo el Estado, Francia, Holanda, Gran Bretaña y Polonia, en festivales como la Quincena Musical de Donostia, The Gregynog Festival, y junto a orquestas como la Orquesta Nacional Rusa, de Letonia, Radio Televisión Española (RTVE), Philharmonia Pomorska, la BOS, la OSE, bajo la batuta de directores como López Cobos, Ros Marbá, Sainz Alfaro, García Navarro, Pommer, Colomer, Tolomelli, Neuhold y Allemandi entre otros.

La cantante es también una asidua de Musika Música, que arrancó ayer con un concierto de la BOS y en el que participarán hasta el domingo más de 1.500 músicos en el Palacio Euskalduna. “Soy una privilegiada porque me han llamado para este festival en muchas ocasiones. Es un honor que cuenten conmigo”, señala.

Zubillaga ofrecerá un concierto muy especial el domingo, a partir de las 19.15 horas en la Sala Barria. Presentará su proyecto discográfico Voces de Cine, “un homenaje a esa larga y deliciosa relación entre el cine y la música”.

el disco El proyecto está basado en una idea original de la mezzosoprano y cuenta con doce melodías con tintes de jazz firmadas por el pianista Iñaki Salvador y el saxofonista Mikel Andueza. El proyecto empezó cuando Ainhoa le llamó a Iñaki Salvador para trabajar con ella. El dúo donostiarra inició así una colaboración que ha durado muchos años, pero después de tanto tiempo decidieron introducir algunos cambios. Entre ellos, grabar un disco, invitar a Mikel Andueza y convertir el dúo en un trío.

La selección de las canciones corrió a cargo de Ainhoa Zubillaga que propuso las que más le gustaban, pero no han conseguido introducir en el disco todas las que querían, ya que por permisos de autor no pudieron grabar todas las melodías que pretendían. Pero están muchas de las joyas musicales que han terminado por independizarse de su origen cinematográfico para convertirse en melodías inolvidables. “Los temas han pasado a formar parte de las historias de nuestra vida. Están canciones como Moon river, de Desayuno con diamantes, Días de vino y rosas, Edelweiss, de Sonrisas y lágrimas; Somewhere over the rainbow, de El mago de Oz o Piensa en mí, de Tacones lejanos , entre otras. Melodías que transitan desde lo lírico al jazz, con arreglos de Iñaki Salvador. “Partimos de una música maravillosa compuesta por Mancini, Gershwin, Weil, Sondheim, Arlen y Kander, compositores que han firmado canciones inolvidables. Iñaki cambia los ritmos, puede hacer de una canción de swing, una bossa nova, por ejemplo. Es algo realmente especial, lo que hace de este disco algo único”, describe Zubillaga.

“Son temas inolvidables que la gran pantalla hizo populares... Canciones que han transcendido aún más a las películas. Provengo de una familia vinculada al cine y los musicales siempre me han atraído. Cada vez que ofrecemos un concierto, la propuesta varía; es la maravilla que sucede con el jazz”. Confiesa que este proyecto le permite más libertad a la hora de cantar. “No tienes que estar sujeta a una partitura, como sucede con lo clásico, que te tienes que limitar a lo que el autor escribió. Aquí cambias los ritmos, puedes introducir pequeñas improvisaciones”.

El concierto se enmarca dentro de la XVIII edición de Musika Música, que está dedicada a la música de Londres y Nueva York. Este año se abrazan nuevas artes como el cine y la literatura. Además, la sala Barria acogerá también el concierto-espectáculo Piano Tour! Con Las Divinas, y también descubriremos qué sucede cuando Gershwin, Elgar y Holst quedan para ir al cine.