BILBAO. Así lo ha asegurado hoy el Ayuntamiento de Bilbao en la presentación del habitual operativo de limpieza, transporte público y seguridad de la multitudinaria cita anual con la música que se celebra en el monte Kobetas de Bilbao, a las afueras de la capital vizcaína.
Aunque el año pasado ya se contó con una discreta presencia de agentes de la Ertzaintza en las tareas de vigilancia y seguridad del festival musical, este año se reforzará su presencia en el mismo ante la situación general que se vive en Europa por la amenaza del terrorismo yihadista.
En anteriores ocasiones, el dispositivo de seguridad corrió a cargo de la Policía Municipal de Bilbao y del personal privado contratado por la organización del festival, que reunía a unas doscientas personas.
En esta ocasión, se ha declinado hacer público el número de efectivos que se ocuparán de esta tarea, para no perjudicar la eficacia del dispositivo, según han indicado fuentes del Ayuntamiento, aunque será similar al desplegado con motivo del multitudinario concierto que ofreció a finales de mayo en San Mamés la banda de rock duro Guns N' Roses.
El dispositivo preparado para el BBK Live contempla que será la Policía Municipal quien, como otro años, vigilará los accesos y la entrada a la zona para evitar hechos delictivos y altercados y prestará especial atención, asimismo, a la venta fraudulenta de entradas y a la seguridad vial de los asistentes.
El Ayuntamiento de Bilbao recomienda a los aficionados a la música acudir al recinto con la mayor antelación posible -especialmente en el caso de los campistas- para favorecer una asistencia escalonada y acortar los tiempos de espera, así como facilitar el registro de bolsos y mochilas si son requeridos para ello.
En el Centro de Coordinación de Seguridad del festival, habilitado al efecto, estarán presente responsables del personal privado de seguridad, de la Policía Municipal, de los Bomberos, de Protección Civil y del personal sanitario.
El Centro de Coordinación y el puesto médico, por su parte, se situarán en una zona próxima al aparcamiento de autocaravanas y dentro del recinto de conciertos se habilitará un puesto médico dividido en dos salas o espacios diferenciados: sala de asistencia médica y sala de evolución.
El operativo de limpieza, por su parte, contará con una media diaria de 30 operarios apoyados por un total de 15 vehículos, entre camiones de recogida y barredoras.
Además, durante toda la tarde, y hasta el inicio del acceso de los asistentes, tendrán lugar labores de repaso, vaciado de contenedores y cubos de zonas comunes, así como un correcto mantenimiento de las calzadas y zonas de entrada y perímetro del recinto.
Con el objetivo de mantener los niveles de limpieza en el recinto se instalarán 194 contenedores, 95 de ellos de 1.100 litros de capacidad, 15 más con capacidad para 2.400 libros y dos contenedores de 15/20 metros cúbicos.
Además se colocarán 8 contenedores y 40 cubos para la recogida de vidrio.