bilbao - Los dos grupos, claves en el pop de los 80, repasarán canciones míticas como Venezia, Marta tiene un marcapasos, Déjame y Ojos de perdida. “Ambos tenemos canciones que son parte de la vida de mucha gente”, dice Urquijo, quien estos días se cuida “de un catarro para estar al 100%” en el concierto, patrocinado por DEIA.
¿Cómo surgió este recital compartido con Hombres G?
-Nos une una gran amistad desde hace años porque coincidimos en multitud de actos benéficos y conciertos solidarios, y nos hemos invitado unos a otros en los escenarios. Además, David Summers cantó en el disco de homenaje a mi hermano Enrique y en nuestro Directo de las Ventas. Yo lo hice en su acústico En la playa. Es gente estupenda y da gusto encontrártelos, ya sea en un escenario o para tomar algo.
¿Es un concierto conjunto único?
-No me importaría que se repitiera, pero que yo sepa es solo para Bilbao. Aunque coincidir otra vez está ahí.
Empezaron ambos en los 80 con un pop muy fresco...
-Lejos de estilos o influencias, ambas bandas tenemos un buen montón de canciones que son la historia de la vida de mucha gente. Las canciones son lo más importante de un concierto y la gente, tanto los seguidores de Hombres G como los nuestros, están ávidos por escuchar esos temas. Creo que el público va a asistir a un buen concierto.
... luego ustedes se dirigieron hacia la raíces de la música estadounidense, el folk y el country.
-Nosotros sí tenemos más influencia americana, tal vez en los arreglos, pero, repito, son las canciones las protagonistas.
Vuelve a Bilbao, su segunda casa.
-Es verdad. Tengo mucha familia y amigos en el País Vasco y sí, es como un segundo hogar. Del público vasco solo puedo decir que es de los más cultos musicalmente y, aunque parezca un cumplido, es verdad que es un placer actuar por esas tierras.
¿Cómo será el concierto?
-Creo que abriremos nosotros el show y tocaremos temas de toda la vida y también otros más recientes. La selección la hacemos siempre con el único interés de agradar y hacer pasar un buen rato a la gente.
Ahí el público es soberano, como suele decir Mick Jagger, y algunas canciones resultan obligadas.
-Correcto, el público es soberano y el culpable del éxito de las canciones. Estamos encantados de cómo han recibido nuestros últimos trabajos y es una satisfacción ver lo bien que conviven temas clásicos y los recientes. A veces, lo complicado es elegir las que no vas a tocar.
¿Cuál es su preferida y las que le cuesta cantar?
-Pero a tu lado es nuestra canción más oída y buscada en la red. Temas como este nunca dejaremos de tocarlos. Se convirtió en un éxito gracias al boca a boca, no intervino ni la radio ni la tele ni la discográfica. Tal vez las canciones más difíciles son las más íntimas de mi hermano, aunque me emociono al cantarlas.
Creo que ya cuentan con canciones para un disco nuevo ¿no?
-Estos días estamos componiendo y preparando lo que será nuestro nuevo disco, que esperamos salga a mediados de 2017. Creo que gustará, y sonará a algo nuevo pero con el sonido de Los Secretos.
¿Sigue tan ‘quemado’ con el contexto cultural y económico que envuelve a la música debido al IVA, la desidia política y el comportamiento de los medios con el arte?
-Ya me estoy acostumbrando (risas). Estar molesto o enfadado no me ha servido de mucho hasta ahora, aunque motivos tenemos todos los músicos. Hay que pensar en positivo porque tenemos uno de los mejores trabajos del mundo. Creo que en un futuro habrá más justicia digital en Internet y se moderará la actitud de los politicos hacia la cultura.
Hablando de futuro ¿cómo ve al grupo y hasta cuándo seguirá en activo? ¿El escenario es una forma de sentirse vivo?
-Tú lo has dicho, para mí es un modo de vida y una actitud. No creo que mientras el cuerpo responda existan motivos para dejar este trabajo que adoro. El futuro lo veo bien, con más conciertos y más discos. Y tenemos la asignatura pendiente del mercado hispano americano, por lo que seguiremos intentando que se nos conozca allí un poco más.