Bilbao - El grupo Maná regresa esta noche al Bizkaia Arena del BEC tres años después de ofrecer un concierto que los mexicanos recuerdan como “uno de nuestros mejores”. La banda, convertida en cabeza de lanza del pop-rock latino más comercial al vender más de 40 millones de discos, asegura que “estamos deseando volver a Bilbao”. En el concierto, con entradas a partir de 38 euros, presentarán sus éxitos y su disco Cama incendiada con “una gran producción”.
“Estamos deseando volver a Bilbao. Nos encanta, es una ciudad alucinante y recordamos el último concierto en el BEC como uno de los mejores de todo el mundo porque la gente es muy cañera. Están muy locos allí (risas). Y luego está la comida y el vino”, indicó a DEIA el vocalista del grupo, Fher Olivera. La banda, que completan el batería Alex González, Juan Calleros al bajo y Sergio Vallín a la guitarra solista, podrá cumplir su deseo esta noche con el recital que finaliza su gira estatal de presentación de Cama incendiada, su último y exitoso disco. “Es un disco que sí, tiene mucha tinta roja, de sensualidad, y mucho sexo en el sentido del cachondeo y de las cosas que vivíamos en ese momento. Mis cuates me dijeron que lo había cargado mucho hacia ese lado, pero salió así, no fue calculado”, según Fher, que creó las canciones tras su divorcio. “De todas formas, no todo es sexo. Hay un tema que se llama Ironía, que habla del amor, de lo que te da y te quita, y otro es Mi verdad, que grabamos con Shakira”, apostilla el vocalista, que asegura componer “desde el interior, desde el corazón, el alma y los testículos; desde la pasión y esa energía que te hace vivir”.
Maná, que defiende que “la música es la medicina del alma”, no se limitará a presentar sus temas más recientes sino que también hará un repaso por los éxitos más sonados de sus casi tres décadas de carrera, caracterizada por el collage de estilos: del pop-rock al reggae, pasando por las baladas, los ritmos latinos y la ranchera. No suelen faltar en sus conciertos éxitos antiguos como Vivir sin aire, El muelle de San Blas y Clavado en el bar y otros más recientes, caso de Labios compartidos, Amor clandestino o Mariposa traicionera.
Gran producción
La agradable y mayoritaria banda sonora de los mexicanos vuelve a apoyarse en su gira en una gran producción en sonido, escenografía y luces. “Está muy bien. La producción es espectacular y ha costado un año completarla. Está hecha en Bélgica por unos técnicos que trabajan con grandes estrellas y ofrece 250 metros cuadrados de pantallas LED, más de 320 luces móviles de última generación y una altísima calidad de sonido y de montaje visual”, concluye Fher.