Noches glamourosas en el Arriaga
Mañana se levantará el telón del Arriaga para acoger la gran producción del teatro para esta temporada, un divertido musical, con mucho glamour, que lleva el sello de Emilio Sagi.
LLEVAN ensayando desde principios de abril. Ayer DEIA se adentró en uno de los últimos ensayos de La viuda alegre, la opereta probablemente más famosa de todas, un verdadero paradigma del teatro musical, que se estrenó en Viena en 1905, con música de Franz Lehár y libreto de Víctor Léon y Leo Stein. Se trata de la producción más importante de la actual temporada del Arriaga que se estrena mañana y que permanecerá en cartel hasta el próximo día 24 como preludio de la celebración, el 31 de mayo del 125 aniversario del teatro bilbaino. Un montaje muy cuidado, con un elenco profesional que procede del mundo del teatro, del musical, de la lírica, de la danza y la acrobacia.
Todo para poner en escena una historia divertida que, según promete Sagi, el director artístico del Arriaga, que se ha encargado de la puesta en escena de esta célebre opereta, no va a dejar frío ni indiferente a nadie en la butaca.
En alguna ocasión Sagi se ha referido al teatro, a los musicales y al mundo lírico como géneros para divertir y entretener en épocas duras, para calentar un poco el corazón de la gente cuando hace frío. “La viuda alegre tiene mucha de esto, es un poco irreal, pero son situaciones que alegran mucho”, explica.
Alegrar al público Reconoce Sagi que no ha pretendido hacer una lectura de la opereta de la decadencia del imperio austro-húngaro, “sino divertir al público”. Porque el espectador pronto se dará cuenta de que la nueva producción no tiene nada que ver con las que haya visto hasta este momento.
La viuda alegre que se sube al escenario del Arriaga es un montaje espectacular, con una elegante escenografía de Daniel Bianco, lleno de glamour, de lujo, al que Sagi ha dado una espectacular vuelta de tuerca y lo ha convertido en un gran musical en el que los cantantes bailan y los bailarines cantan y la música es interpretada en directo por una orquesta de 12 músicos.
Emilio Sagi ha explicado que la idea de trasladar al mundo del musical la célebre opereta se le ocurrió tras ver en San Francisco (EE.UU., un musical basado en la partitura de la ópera La Bohème, de Puccini. “Me pareció tan sumamente interesante ese cambio, ese acercamiento del género lírico al mundo del musical, que fue una de las razones que me impulsó a llevar La viuda alegre al campo del musical. Además, me ha fascinado desde siempre, la he escuchado muchísimas veces desde pequeño porque mi tío, el barítono Luis Sagi-Vela, la había grabado”.
La protagonista es Natalia Millán, reconocida actriz de teatro, cine y televisión, pero también recordada por sus estelares trabajos en el mundo del musical en Cabaret o Chicago. Millán asumirá el papel de la elegante y misteriosa Hanna Glawari, foco de las intrigas amorosas en la embajada en París de Marsovia. Junto a Natalia Millán, estarán sobre el escenario el barítono Antonio Torres (conde Danilo), quien se enfrentará a la patriótica tarea de seducir y desposar a la joven viuda acaudalada, para que su fortuna no salga del pequeño principado de opereta, de cuya embajada en París es Danilo primer secretario.
La tarea parece sencilla porque el mozo es apuesto y el uniforme le queda como un guante, pero no lo es porque hay entre ellos una vieja historia de amor despechado, porque otros pretendientes con iguales méritos se han fijado el mismo objetivo, y porque la viuda, ya lo dice el título, es alegre y no le pone mala cara a nadie. Mientras, la orquesta encadena valses y el champán y la alegría se derraman a raudales.
Sobre el escenario, también estarán la cantante y bailarina Silvia Luchetti (Valencienne), el joven actor argentino Guido Balzaretti (Camille), el barítono José Manuel Díaz (barón Mirko Zeta), el tenor Enrique Viana (Njegus) y Enrique Viana (Njegus), quien ha llevado a cabo también la adaptación de los diálogos originales al lenguaje y los modelos sociales actuales, eliminando referencias con tintes “machistas” e incluso “clasistas”.
Al sexteto principal hay que sumar la aportación de un gran coro, que además bailará y cantarán, formado por 16 intérpretes, la mayoría del País Vasco, como Begoña Álvarez, Ylenia Baglietto, Sandra Fernández Aguirre, Itxaso Quintana, Loreto Mauleón, Ana Sagastizabal, Lara Sagastizabal, Karmele Larrinaga, Alberto Ferrero, Rafa Higuera, Antonio Hurtado, Iñaki Maruri, Alberto Núñez, Aritza Rodríguez, Egoitz Sánchez y Mitxel Santamarina. La partitura también ha sido adaptada por el director musical, Jordi López, para que la música pueda ser interpretada en directo por una orquesta de 12 músicos.
En sus 35 años de carrera como director de escena, Emilio Sagi ha disfrutado realizando producciones de óperas, como Tancredi, de Rossini, que ha presentado en la Ópera de Lausanne, pero también ha conseguido que el género musical se suba a escenarios como el Arriaga o al de la Zarzuela, donde recientemente acaba de dirigir con gran éxito la puesta en escena de Lady, be good! “Espero que el público ahora disfrute con La viuda alegre tanto como hemos disfrutado nosotros”, explicó en la presentación de su más reciente proyecto.