gasteiz. En navidades, entre charlas de unos y otros, nació la idea. Desde hace unas semanas es una realidad en Facebook. Y ayer se materializó de manera oficial con su primer espacio conquistado. El arte tiene que ser visualizado, conocido, compartido, y si la crisis y las políticas culturales llevan al cierre de lugares donde se puedan encontrar los creadores locales y los espectadores más cercanos, ellos y ellas inician juntos este camino para ocupar, con todo el permiso del mundo, establecimientos y puntos de encuentro públicos. Mostrar para visualizar y concienciar. Y si se puede vender, también. Así aparece Art¡eh!.
Mintxo, Santos Iñurrieta, Javier Hernández Landazabal, Carlos Marcote, Koko Rico, Paco San Miguel, Juan Sagastizabal, César San Millán y Lourdes Vicente conforman un colectivo que cuenta con la colaboración de Ione Aldave, Ernesto Esparza, Ángel López de Luzuriaga, Oscar Ochoa y Carmen San Esteban. Un grupo humano y artístico en el que a Carlos Lalastra le ha tocado el papel de coordinador.
La situación por la que pasa la cultura en Araba es de tal deterioro que el colectivo ha decido reunirse para buscar y encontrar zonas donde hacer pequeñas exposiciones, aperitivos, por así decirlo, para hacer visibles sus obras. El inaugurado anteayer es un buen ejemplo. La sede de la asociación de pensionistas, jubilados y viudas Las Cuatro Torres es ya territorio para algunas de las pinturas de Marcote. En breve, otros lugares parecidos se unirán a esta senda.
En cada punto, varias piezas e información de Art¡eh!, de lo que es y cómo ponerse en contacto con ellos. "No son exposiciones al uso porque los lugares no están preparados para ello y tampoco es lo que se pretende. Se busca que la gente vea, que se percate, que se interese, que, si quiere, tenga la oportunidad de profundizar más después e incluso, si se tercia, que compre en un contacto directo con el autor", apunta un Lalastra que recuerda que el proceso del arte no se detiene en la situación actual.