Marbella. Antonio Banderas y Eva Longoria fueron los encargados de capitanear la segunda edición de la Gala Starlite, una cena benéfica, de entre 800 y 1.000 euros, que reunió a destacadas personalidades de todo el mundo. Los anfitriones, acompañados de Melanie Griffith, estamparon su firma en los coches de la marca patrocinadora que fueron subastados para recaudar fondos.

El evento destinará la recolecta a las fundaciones Lágrimas y favores, Niños en Alegría y Eva's Heroes, para lo que contó a lo largo de la velada con subastas, rifas, artistas solidarios, entradas a la after party e intercambio de experiencias con los invitados. Entre estas últimas, está el poder pasar un día con Eva Longoria en el set de Mujeres desesperadas, la asistencia a los premios Grammy y cuatro días en Formentera en casa de Eugenia Silva.

Oceana, Jermaine Jackson, La Unión y Victoria Swarosky son algunos de los artistas que actuaron en la Gala Starlite. Y por su parte, Antonio Banderas declaró que era la segunda fiesta a la que asistía en Marbella en dieciséis años, y tuvo como objetivo conceder desde la fundación Lágrimas y favores becas de posgrado a los estudiantes de la Universidad de Málaga para estudiar en EE.UU. y Canadá. El actor afirmó que el país necesita pasar de una "economía especulativa" a una "productiva", que necesitamos "gente preparada con visión de futuro", y que se pretende hacer de la Starlite una "gala institucional" para dar a Marbella un "empujoncito" después de los escándalos por el caso Malaya.

Respecto al cuestionamiento de que los famosos celebren este tipo de eventos, Antonio Banderas considera que "no importa el motivo por el que lo hagas", ya que el niño que recibe la ayuda quiere "medicinas, agua y alimentación".