sidney. Oprah Winfrey se ha definido como la "mayor bocazas del mundo" durante su gira por Australia. "Me he nombrado a mí misma embajadora y soy la mayor bocazas del mundo", declaró Oprah ante los miles de fans que se congregaron delante de la Casa de la Ópera de Sidney para también ver actuar en directo a dos de los invitados: el rockero Bon Jovi y el rapero Jay-Z.
A ambos se unieron el actor Russell Crowe y la familia del fallecido Cazador de Cocodrilos Steve Irwin, muy aplaudidos por el público.
La entrevistadora afirmó que ha cumplido un sueño con la visita a Australia, y por eso quiso traerse a 300 de sus mayores seguidores en el último año del The Oprah Winfrey Show. Miles de residentes hicieron guardia de madrugada en el famoso paseo del puerto de la ciudad esperando su llegada, y los vendedores callejeros aumentaron sus ventas de camisetas y gorras.
La diva de la pequeña pantalla aprovechó la ocasión para negar que su presencia en Australia sea una mera estrategia publicitaria del departamento de Turismo, que se ha gastado seis millones de dólares (unos 4,4 millones de dólares) para promocionar el país en todo el mundo. "Es la verdad, pero no se puede poner precio a lo que pueden lograr cuatro horas de televisión sobre el amor a un país, retransmitidas a 145 países (...) pero, ¿no os ha gustado", dijo presumiendo de su tirón entre los telespectadores.
Los expertos creen que el turismo obtendrá un beneficio que multiplicará por diez su inversión.