“Vamos a traer a Bilbao el Tour”
El Ayuntamiento trabaja junto a la Diputación para traer la ronda gala a la capital vizcaina en 2019
Bilbao - No fue un adiós, sino un hasta luego, lo que vivió Bilbao ayer cuando se despidió de los casi dos centenares de ciclistas que pusieron rumbo a Nafarroa. Porque nada más dejar marchar a la Vuelta, con unas sensaciones magníficas y completamente volcada con el evento, la capital vizcaina ya se puso manos a la obra para acoger su siguiente objetivo: el Tour de Francia. La cita deportiva anual más importante de cada verano. Y es que, tras informar de la reunión que tuvo el pasado jueves con el director general de la ronda francesa, Christian Prudhomme, el alcalde de la villa, Juan Mari Aburto, se mostró “convencido” de que Bilbao será escenario de una etapa de la Grande Boucle: “Vamos a traer el Tour de Francia porque hasta el momento era un sueño, pero a partir de ahora es una posibilidad real”. Y es que, tras las primeras conversaciones, ambas partes ya dan casi por hecho el paso del pelotón por el botxo. “Hay un encuentro de voluntades, la organización del Tour piensa que Bilbao es una ciudad magnífica que reúne todas las condiciones necesarias para recibir la carrera, como hemos demostrado en los últimos dos días. Y Bilbao quiere que el Tour venga”, explicó Aburto.
De hecho, tanto el alcalde como Prudhomme abrieron el calendario en 2019, puesto que el Tour ya tiene completamente cerrados todos los compromisos de los próximos dos veranos; sin embargo, a pesar de ello, Aburto todavía no quiso confirmar fecha alguna. “No vamos a decir que el Tour llegará a Bilbao en 2019 porque no lo tenemos claro ni seguro. Puede ser en esa edición o la siguiente”, reconoció el alcalde.
Asimismo, otro punto que el responsable del Consistorio reconoció estar también en el aire es el papel que jugará Bilbao en la carrera. Porque el abanico de posibilidades es variado. El alcalde admitió que la capital vizcaina podría ser la salida y la llegada de una etapa, o el punto inicial de un recorrido que finalizara en Donostia o incluso en Urdax -tal y como ocurrió en la etapa de ayer de la Vuelta-. De igual forma, el primer edil explicó que Bilbao podría ser el enclave perfecto para enlazar el Tour con los Pirineos, si a la organización le interesa encontrarse pronto con la alta montaña; albergar varias jornadas o incluso protagonizar el inicio de la ronda gala -un prólogo del que ya pudo disfrutar la capital guipuzcoana en 1992-. Aunque esto último casi quedó descartado por el propio alcalde: “No hemos hablado de la salida aunque sabemos de antemano que el Tour llegaría en un vuelo y no en bici. Por ello, se puede plantear la llegada en un día de descanso y así tener durante más tiempo a estos grandes ciclistas. Me parece una posibilidad increíble poder tener la carrera en Bilbao dos o tres noches”, explicó.
la vuelta, un ensayo Que Aburto aprovechara el paso de la Vuelta por Bilbao para reunirse con el director general del Tour no fue casual. El alcalde quiso que Prudhomme viviera en primera persona la llegada del pelotón a la capital vizcaina para demostrarle que el botxo está preparado para pasar a la historia de la carrera francesa. Y Prudhomme quedó tan gratamente sorprendido que las voluntades de ambas partes no tardaron en ir por el mismo camino. Sin embargo, el propio Aburto reconoce que, sin desmerecer a la Vuelta, “el Tour es otra liga, las cifras del impacto económico y mediático son de enorme importancia, pero también su inversión”. A pesar de ello, el alcalde bilbaino reiteró que “el Tour es una ilusión que se va a convertir en realidad”.
Así pues, la primera piedra para que la ronda gala se estrene en la capital vizcaina ya está puesta. El proyecto ha comenzado a andar con el objetivo de llegar a buen puerto en 2019, aunque de momento Aburto prefiere ir “con tranquilidad”: “El Tour todavía está trabajando en sus dos próximas ediciones y, mientras, nosotros vamos a empezar a trabajar en este proyecto que nos ilusiona y en el que nos vamos a volcar, aunque para el que todavía falta tiempo. Hemos puesto en marcha varios grupos de trabajo para ello, pero todavía no tenemos calendario previsto para reunirnos de nuevo con la organización”.
Porque Bilbao es consciente de que las cosas de palacio van despacio. Que, aunque el Tour esté necesitado de ciudades, de enclaves novedosos que sigan moviendo la rueda del la carrera francesa, al botxo todavía le quedan dos años por delante para seguir convenciendo a Prudhomme de su candidatura. Así, lo único que Aburto dice tener claro es que la Grande Boucle pasará seguro por la capital vizcaina. “Podemos afirmar con rotundidad de que es posible. El Tour está enormemente ilusionado, de hecho, las propuestas que había encima de la mesa son suyas y no nuestras. La ciudad está preparada para este tipo de eventos y nosotros queremos llevarlo adelante”, concluyó Aburto.
la eurocopa de 2020 El alcalde bilbaino reconoció que, en caso de que no fuera posible el paso del Tour por Bilbao en 2019, se trabajaría para que ocurriera en 2020, lo que colocaría a la capital vizcaina en el centro deportivo internacional de ese verano. La ronda gala podría suceder a la Eurocopa de ese mismo año, puesto que una de sus sedes será San Mamés. Ya es sabido que el estadio del Athletic albergará tres encuentros de la fase de grupos más un duelo de los octavos de final y, aunque todavía se desconocen las fechas oficiales tanto del torneo de fútbol como de la Grande Boucle, todo parece indicar que tendrían lugar entre junio y julio, como se vienen desarrollando históricamente estos dos eventos.