MIREN Agur Meabe lleva el éxito como si fuera un periódico enrollado bajo el brazo. Sin darse importancia. Como si le fuera a servir para envolver un bocadillo de sardinillas mañana. O para encender un fuego otro día. Y eso le proporciona un encanto especial.
Premio Nacional de Poesía, académica de Euskaltzaindia, escritora de éxito. Nada le ha apolillado la paciencia ni le ha erosionado la sonrisa. Natural. Sin afectación alguna. Ayer pronunció una conferencia sobre su novela Kristalezko begi bat (Un ojo de cristal), que cumple 10 años de su publicación. Pasarían de docena y media las personas que esperaban que abrieran la puerta de Euskaltzaindia bajo los arcos de la Plaza Nueva. La autora apareció como si ella misma fuera una asistente más. Se retrató, charló y saludó. Todo el mundo, sin excepción, le llama Miren Agur. Igual que si a Pérez Reverte se le dirigiera el personal de a pie con un Arturo a pelo. ¿Se lo imaginan? Pero Miren Agur es Miren Agur. Como si fuera de casa. Es la sensación que produce la autora lekeitiarra.
Formaban parte del mayoritariamente femenino grupo de aguardantes, el concejal de Euskera y Educación del Ayuntamiento de Bilbao, Koldo Narbaiza, o el exprofesor de la UPV/EHU y exparlamentario, Karmelo Landa.
A eso de las siete de la tarde se acercaron muchas más gentes interesadas en la autora y su obra. Ya en la sala de conferencias de la academía de la lengua vasca, Maite Salutregi Torrealdai, de Bilbo Zaharra, presentó a la protagonista. Pero antes, Josune Muñoz le entregó un tapete, posiblemente realizado a ganchillo, por una amiga insomne la noche que leyó Kristalezko begi bat.
De la institución organizadora del evento de ayer y de la lectura de hoy, el euskaltegi Bilbo Zaharra, se acercaron Jon Maguregi, Paulo Alberdi, Julen Pagazaurtundua o Karolina Almagia. Asistieron además, Nicole González de Heredia, Mari José Arrieta, Nerea Etxaniz, Bego Goiriena, Lorea Araiturri, Isa Castillo, Eva Rodríguez, Josune Muñoz, Matxalen Oleaga, Begoña Larrondo, Mari Carmen Goiriena o Garbiñe Malaxaetxebarria. Entre quienes acudieron se contaban María Luisa Etxebarria Zalbidegoitia, Izaskun y Arantza Olalde o Tere Kortazar.
Desde las ocho de la mañana de hoy se lee en público en el Arriaga, con reproducción en la pantalla gigante ubicada en la plaza del teatro, Kristalezko begi bat. Pasarán por el atril Bingen Zupiria, Joseba Sarrionaindia, Lorea Bilbao, Susana Andrés, Ana Otadui, Juan Mari Aburto, Elixabete Etxanobe, Miren Dobaran o Andres Urrutia. Se reproducirán los pasajes que han grabado en vídeo desde 50 Euskal Etxea de todo el planeta. También los de todos los centros con Secundaria y Bachillerato de Bilbao.
Se han leído desde hace 16 años Peru Abarka, Gero, Obabakoak o Kresala. Y ahora, la novela de Miren Agur. Pero ella seguirá igual.
