FUE el pistoletazo de salida, el arranque de la novena edición de Bilbao Basque Fest, un festival en el que Bilbao se sumerge en la cultura perpetua de los cinco días santos. Se anunciaron cinco días con más de 200 actividades gratuitas, para todos los gustos y edades, relacionadas con la gastronomía, herri kirolak, la música o el cine en una treintena de espacios de Bilbao. Cicerón dijo que la filosofía era la cultura animi, el “cultivo del alma”, y en castellano se trasladó ese sentido agrícola al de la formación, el desarrollo de la lengua y de la literatura, el desarrollo mental a través de la educación, y por último las ideas, las costumbres y las condiciones intelectuales y artísticas de una sociedad o grupo.

El fenómeno de la globalización actual, en su afán de unificar los mercados, está poniendo en peligro las variedades culturales, su identidad, además de deteriorar su capacidad creativa. El inicio se produjo con la presentación del festival a cargo del músico Xabier Aburruzaga, un artista del folk, en representación de los artistas que participan durante los cinco días. El comienzo del festival estuvo protagonizado por el espectáculo audiovisual Munduko Soinuak, visual experience de la compañía Izar Blue, donde participaron la voz de Itziar Garaluce, la txalaparta de Ander Sánchez, Israel Martín, Adama Guendo y un buen número de gente que pobló el escenario de emociones. Dirigido a todos los públicos y a partir de un paisaje sonoro, esta obra es una experiencia inmersiva que fusiona música en directo con contenidos audiovisuales que produce un mundo de atractivas texturas. El Atrio de las Culturas del centro se erige como el espacio idóneo para la recreación de los sonidos del mundo a través de diferentes instrumentos.

Este concierto estrenó la sección del festival que lleva por título Nuevos lenguajes artísticos y que mañana viernes, 7, y el sábado, 8, ofrecerá un concierto del compositor y productor ex-We Are Standard Jon Aguirrezabalaga, Zabala, que combinará de forma experimental y con toques orientales, géneros como el synth, el dream-pop y el electro-ambient.

Entre las grandes novedades de esta edición, destaca el acuerdo con el Athletic Club que preside Jon Uriarte por su 125º aniversario que se suma a Bilbao Basque Fest con la exposición de seis camisetas históricas del club en un recorrido que comenzará en la carpa gourmet de El Arenal, pasando por cinco hoteles de la villa y con San Mamés como telón de fondo.

Tras echar un vistazo a lo previsto, diremos que a la cita de ayer acudieron Xabier Ochandiano, Jon Bilbao, Carmen Muñoz, Jone Goirizelaia, Ibon Calderón, Raúl Cancelo, hombre fuerte de Hortzmuga, Jorge Aio, gerente de Bilbao Centro; Mercedes Rodríguez, Cristina Múgica, Javier Garcinuño, director de Bilbao Ekin-tza; Janire Torvisco, en nombre de la Asociación de Comerciantes del Casco Viejo, Jon Andoni Zarate; el presidente de Bilbao Dendak, Rafa Gardeazabal; Beatriz Marcos, Guillermo Bustamante, Ana Lado, Begoña Ruiz; Alberto Pascual y María Pascual, de Innevento; Txarly Marqués, atento a que todo fluyese, Sandra Ruiz, Ariana Martínez, Joseba Aranguren, junto a sus hijos Mikel y Xabier Aranguren, que esperaron hasta última hora a la amatxu, Maite Etxebarria (¡llegó a última hora para alegría de los chavales!). Idoia Ugartetxe, Jon Hernández y un buen número de asistentes. Todos supieron que el estreno del Gargantúa y un clásico de la cultura popular como es la verbena que llenará de música y energía el kiosco de El Arenal. Asimismo, la Sociedad Filarmónica de Bilbao se suma a las localizaciones habituales con el concierto de Xabier Aburruzaga Band, máximo exponente del folk vasco actual.

Un año más, El Arenal será el epicentro del festival con el Txoko Gourmet y los herri kirolak.