JOSÉ Félix Merladet, presidente del joven Rotary Club de Portugalete, sacó pecho en la presentación de la conferencia que ayer tarde organizaba en el salón de actos del centro cultural Santa Clara de la villa jarrillera. “Este es el acto número 71 de los que promovemos desde nuestra constitución. Son 10 eventos al año. No hay club rotario con mayor actividad en Euskadi”, aseguró Merladet.

Lo del Rotary portugalujo es un no parar. Ayer disertaba el conocido magistrado riojano de la Audiencia de Nafarroa, José Francisco Cobo, sobre el 70 aniversario del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea. Cobo, presidente de la Sección Segunda de la citada audiencia desde 1992, es experto en derecho de la Unión Europea, además de en cooperación jurídica internacional; y fue representante español ante el Consejo Consultivo de Jueces del Consejo de Europa. Así que su carrera le sitúa como persona más que cualificada para pronunciar la conferencia titulada Todo lo que siempre quiso saber sobre el Tribunal de Justicia de la Unión Europea y nunca se atrevió a preguntar. Sin embargo, si su nombre suena a quien lea estas líneas, se debe a la relación del magistrado con la sentencia de La Manada.

Cuando José Félix Merladet llevaba unos minutos desgranando un currículum vitae que se alargaba hasta cinco páginas, Cobo puso tono de presidente de sala y le interrumpió con un jocoso “señor letrado, le tengo que llamar al orden”, que despertó las sonrisas de la audiencia, cortó el relato sobre su trayectoria e inició la conferencia.

Tras agradecer al Rotary Club la invitación, el magistrado dio paso a un “vídeo muy ameno” sobre el funcionamiento de la corte europea. Como el tribunal data de 1952, cuando la Unión Europea aún era la Comunidad del Carbón y el Acero, aparecían en el audiovisual muchos señores muy serios, en rotundo blanco y negro, con sus togas oscuras y sus baberos inmaculados. Después, el presidente del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, el belga Koen Lenaerts, disertaba en francés con subtítulos, teniendo los 27 asientos de la Gran Sala al fondo.

“No somos conscientes de lo que el tribunal ha cambiado nuestras vidas desde 1952”, aseveró Cobo al arrancar su disertación, que se prolongaría hasta las 21.00 con turno de preguntas incluido. Le escuchaban el exfuncionario de la Unión Europea, el portugalujo Luis Miguel Pariza, además de los rotarios del club local Andoni Pastor, José Sánchez Ezcaray o Iñaki Zugadi. 

Se acercaron hasta el centro cultural Santa Clara Mario Sáiz, Alfonso Pérez, María Jesús Peña, María Teresa Gandasegui, Roberto Murga, Miguel Fernández Zabala, Javier Quintano y Ricardo Rubio, quien se enteró en la biblioteca jarrillera de la conferencia y le llamó la atención. 

Acudieron también Ángel Viñas, José Luis Béjar, Pilar López, José Antonio Otxoa, Mari Luz Nanclares, Isabel Bidegain o Elena Urigüen.