Ni txupinazo, que debía celebrarse mañana mismo, ni jornada de Andra Mari, ni sukalki en San Roque ni desfile de disfraces en San Roketxu. El Ayuntamiento de Gernika-Lumo anunció hace semanas que las fiestas patronales no se iban a celebrar en su formato habitual, pero en una rueda de prensa ofrecida ayer, y a la vista de la revolución del coronavirus, los responsables municipales anunciaron la suspensión de la práctica totalidad de actos. Además, realizaron un llamamiento a la prudencia y a la responsabilidad de la ciudadanía. "No podemos arriesgarnos, un confinamiento ya es suficiente", remarcó ayer el alcalde, José María Gorroño.

El alcalde, José María Gorroño, flanqueado en la rueda de prensa de ayer por los concejales Jokin Garatea e Iñaki Gorroño. Foto: I. Fradua

La localidad foral pospone así hasta el año que viene sus fiestas patronales "por responsabilidad y por seguridad de la ciudadanía, en un contexto de fuertes restricciones sanitarias por la crisis del coronavirus que ha alterado nuestra vida, familiar, social y nuestros comportamientos laborales", evidenció un Gorroño que compareció junto al edil de Cultura y Fiestas, Jokin Garatea, y el de Ferias, Iñaki Gorroño. No en vano, recordaron que Gernika-Lumo no está para fiestas, al apuntar que la villa ha tenido 107 casos de covid-19 hasta el momento. "Tenemos que cumplir con las directrices marcadas por Osakidetza", relataron. "Ya sean las personas jóvenes como las más avanzadas en edad, todos y todas debemos hacer caso de las normas para evitar la expansión del coronavirus", redundaron.

Tan solo un acto se salva de la suspensión. Se trata de la misa del día de San Roque, patrón de Gernika-Lumo, que se celebrará el domingo, a las 12.30 horas. De igual forma, Gorroño anunció que ese mismo día, a las 13.30 horas, se encenderá una vela -de casi un metro y medio de altura- en la plaza de los Fueros ante a la imagen del santo instalada en la fachada del edificio consistorial, en "homenaje a las víctimas del coronavirus y a las personas que han trabajado en los servicios esenciales" desde que comenzó la pandemia hace ahora cinco meses.

Control

Además, anunciaron que la Policía Municipal, en colaboración con la Ertzaintza, extremará la vigilancia sobre txokos, bares y restaurantes, que deberán cerrar no más tarde de la 1.30 horas, sin que pueda permitirse el acceso de clientes ni expedir consumición alguna desde esa hora, y tendrán un periodo máximo de desalojo de treinta minutos. Así mismo, vigilarán el cumplimiento de las medidas sanitarias en las terrazas.

Por su parte, y a pesar de que habían planteado realizar actividades culturales alternativas a las fiestas, Garatea reseñó que no será así. "No es el momento adecuado, y si bien habíamos perfilado algunos actos, los dejaremos para septiembre, siempre que se puedan celebrar. No podemos correr ningún riesgo sanitario", advirtió.

"La Policía Municipal, junto a la Ertzaintza, hará un control más exhaustivo estos días"

Alcalde de Gernika-Lumo

"Realizaremos los actos culturales alternativos a fiestas en otro momento; no vamos a arriesgarnos"

Concejal de Cultura y Fiestas