La Kultur Etxea de Berriz será este próximo miércoles a partir de las 19.00 el escenario que albergará la entrega de los XVII DEIA Laboral Kutxa Hemendik Sariak para reconocer la contribución, trayectoria y empeño de 10 entidades, colectivos y personas por hacer una comarca mejor; más cultural, más social, más solidaria y participativa.
Seguir trabajando por un Berriz más solidario y sensibilizado en cuestiones de calado social es el espíritu que sigue manteniendo vivo al Consejo Municipal de Bienestar Social, Igualdad, Inmigración y Cooperación de Berriz. Esa fue la llama que se prendió hace ahora 44 años y pese a las adversidades sigue a flote gracias a las personas que apostaron por este espacio totalmente abierto e independiente donde se trabajan muchos aspectos. “El consejo se forma en el año 1980 con el objetivo principal de fomentar la participación de la ciudadanía en la planificación y evaluación de los servicios sociales de ámbito municipal y, además, en un principio el Consejo estaba reglado y tenía carácter de órgano de participación directa con el Ayuntamiento”, explica Odei Arrizabalaga miembro del consejo.
La decimoséptima edición de los DEIA Laboral Kutxa Hemendik Sariak se celebran el miércoles 23 en la Kultur Etxea de Berriz
Y al igual que ha evolucionado la realidad social de Berriz, el propio consejo ha experimentado cambios de todo tipo. “Desde el propio nombre, funcionamiento, miembros participantes hasta ámbitos de trabajo, pero lo que nunca ha cambiado en todos estos años es el lazo de unión del Consejo con el ámbito de los servicios sociales, la sensibilización de la sociedad, la solidaridad, etc.”, añaden desde el consejo.
Algo que llevado a la práctica se traduce en la organización de innumerables actividades de todo tipo que se suceden cada año, “desde actividades relacionadas con dar a conocer los servicios sociales, medio ambiente, recogida de alimentos para el Sahara, las jornadas solidarias”, enumeran. En este sentido, una de las actividades más destacadas es el Encuentro Intercultural que este año celebró la XVII edición.
Siendo conscientes de que el reto “más realista y a corto plazo, es poder mantener una dinámica de trabajo o un grupo más numeroso y estable”, y que existe un peligro real de que “el Consejo desaparezca por falta de participación”, no dudan en hacer un llamamiento a la ciudadanía para que acudan a las convocatorias.
En esta misma localidad se encuentra Haztegia, el programa de test agrario de la comarca de Durangaldea como proyecto piloto para Bizkaia, que a lo largo de los últimos tiempos no ha cejado en su empeño por revertir la falta de relevo generacional del sector agrario. “A finales del 2019 se identifica una falta de relevo generacional en las empresas agrarias familiares, en un escenario en el que, si no se actúa con urgencia, en 10 años desaparecerán el 40% de las explotaciones agrarias. De esta realidad se desprende la necesidad de fomentar la agricultura sostenible para incrementar la producción local y ecológica que garantice los alimentos necesarios para una demanda creciente”, indican desde la Asociación de Desarrollo Rural Urkiola, impulsora de esta pionera estrategia alimentaria, que ofrece a la persona emprendedora un soporte físico, con tierra e instalaciones para la producción y comercialización en huerta ecológica con acompañamiento integral –tutorización, asesoramiento y formación– y cobertura legal.
“Desde Haztegia se entiende el emprendimiento en el agro como un camino en el que hay que pasar por diferentes fases en un proceso de formación y experimentación continua”, apuntan al tiempo que concretan algunos retos de futuro. “Estabilizar el proyecto, seguir ayudando para que el gran problema actual del sector primario –el relevo generacional– pueda encauzarse y convertirse en un programa interinstitucional en el que cada actor encuentre su papel, y entre ellos las Asociaciones de Desarrollo Rural”. En este camino, sin duda, la distinción del miércoles les ayudará “a seguir en el camino emprendido, aprendiendo de los que más saben de estos espacios test y nos dará una motivación más para solucionar dificultades”.
Apartado cultural
Un año más, la cultura jugará un papel fundamental en la decimoséptima edición de los premios. Así, dentro de este apartado se encuentra el dantzari garaitarra Javier Etxeita. Y es que, con apenas nueve años ya era dantzari titular tras aprender con el maestro Santos Oregi. Esta pasión le venía de familia por su abuelo Antonio Duñabeitia, alias Txikerra. “Fue uno de los dantzaris más populares de la época. En mi casa siempre ha habido mucho interés por la dantza; mi hijo es dantzari y txistulari y mi nuera también baila”, reconoce con orgullo de tener relevo generacional.
Con el propósito de que la dantzari dantza nunca se pierda en Garai, Javier ha impartido durante años clases a los grupos más jóvenes del municipio. Este verano, por ejemplo, ha realizado varios ensayos con dantzaris de la localidad. “Sabían de antes, pero hemos intentado perfeccionar la técnica; me gusta trasmitir mis conocimientos a los jóvenes. No me gustaría que Garai, con toda la historia que tiene, perdiera esta tradición”, asegura con sentimiento el dantzari a sus 75 años. Sorprendido por el reconocimiento, Javier Etxeita asegura que vive “la dantza de manera altruista; disfruto enseñando y viendo a la gente bailar”.
Sin salir de la cultura, también habrá reconocimiento para el actor iurretarra Juanjo Otero. No en vano, son tres décadas subido al escenario. Con cariño recuerda el taller del Instituto de Durango donde le entró el gusanillo y descubrió lo que quería en la vida. Fue en 1997 cuando obtuvo su primera nómina dentro del régimen de artistas dando el salto profesional con la compañía catalana Els Comediants. “El teatro para mí es una forma de expresión y de vida que comparte el resto de mi familia. Tenemos la suerte y la responsabilidad de utilizar este arte para mostrar situaciones que nosotros estamos viendo que ocurren”, explica orgulloso de su profesión.
Tras adquirir experiencia, Juanjo decidió fundar Barsanti Teatroa en 2018. Su primer espectáculo Kale Gorrian-Desahucio fue todo un éxito. Desde entonces, la compañía, con reconocimientos de prestigio, se ha convertido en un referente del teatro de calle vasco con una forma de hacer muy reconocible. En la actualidad, la compañía se encuentra representando su cuarto espectáculo titulado LJ75 Lanean Jarraitu 75 urte arte.
El próximo día 28 Juanjo cumplirá medio siglo de vida. “El reconocimiento del miércoles me parece un gran regalo. Me hace muchísima ilusión y supone una carga emocional grandísima. He sido entrevistado por medios en Corea del Sur y siempre he dicho que yo vengo de Iurreta. Me siento orgulloso de haber llevado su nombre lejos y ahora es enriquecedor que en casa reconozcan tu trayectoria”, apostilla el actor iurretarra.
Ligado también al mundo de las bellas artes, se pondrá en valor la trayectoria de la Asociación Artística del Duranguesado. La entidad comenzó a fraguarse en torno a 1975 y es en 1991 cuando se crea legalmente, contando con 56 personas socias en la actualidad. El objetivo que persigue es fomentar las artes visuales entre la ciudadanía de cualquier edad y estrato social, visibilizando y poniendo en valor la creación y producción de artistas locales y comarcales en activo, siendo un punto de encuentro para artistas y entusiastas del arte. “Nos supone una gran satisfacción este reconocimiento externo a nuestra labor, que es fruto del duro y constante trabajo que han desarrollado durante más de tres décadas las personas compañeras de la asociación que nos han precedido y nos gustaría dedicárselo a ellas”, señalan desde la entidad artística.
Se trata de una asociación sin ánimo de lucro, con financiación pública a través del departamento de Cultura del Ayuntamiento de Durango, y privada mediante la aportación de las y los socios.
Gran parte del trabajo consiste en la gestión de la sala de exposiciones municipal de Ezkurdi, con un completo calendario anual de exposiciones, intercambios culturales con otras asociaciones y entidades, y la organización de tres concursos.
José Luis Martínez de Antoñana fue el primer presidente que tomó el timón de un proyecto que aunaba a personas con inquietudes artísticas. Este inicio de curso, Amaia del Amo, que se estrena en la junta, ha cogido las riendas y el relevo en la presidencia de la asociación, “Personalmente, el cargo de presidenta que ostento desde enero supone un honor y un afortunado reto que me hace crecer como persona, como artista y como ciudadana durangarra”, relata ilusionada Amaia del Amo.
Deporte
Mención especial para el abadiñarra Miguel Ángel Munitxa. Y es que, toda una vida ligada al deporte bien merece una distinción. Rostro muy conocido en la localidad, a sus 72 años, además del fundador y atleta de Sekulebedarra Kirol Kluba de Abadiño, Munitxa estuvo en la época gloriosa del Bidezabal con el equipo militando en División de Honor, trabajó una década en la federación vasca y de joven también jugó en el primer equipo de fútbol del Abadiño, que lo llegó a presidir en tres etapas diferentes. “Siempre es de agradecer que alguien se acuerde de que has estado dando el callo toda la vida ya no sólo a nivel competitivo, sino llevando diferentes clubes y organizando un montón de pruebas”, comenta.
Vinculado desde siempre al atletismo, Munitxa sigue compitiendo, sumando metales en veteranos y ya tiene la mirada puesta en sus próximos objetivos. “Estaré en tres campeonatos de España, en el de Euskadi y prepararé con cariño el europeo que se disputará dentro de un año en Portugal”, detalla.
Otra disciplina deportiva como el ajedrez tiene nombre propio en Durango. Larrasoloeta Xake Taldea y sus cuatro décadas de pasión por este juego de estrategia. Sin duda, este 2024 está siendo un año realmente especial para la pequeña gran familia que conforma Larrasoloeta Xake Taldea e inmersos en las actividades de celebración del 40 aniversario, “este reconocimiento nos demuestra que estamos haciendo las cosas bien, que no queda en saco roto y nos ayuda a mantener la motivación más si cabe en un año tan especial como este”, agradece Mikel Canibe presidente del club durangarra, que cuenta con el respaldo de casi medio centenar de socios y una treintena de txikis.
Por el momento, de cara a la nueva temporada, competirán en liga con cinco equipos; la escuela también seguirá con su frenética actividad y a medio largo plazo, uno de sus grandes retos es retomar la organización del Open Internacional de Ajedrez que se celebraba en Durango.
De la mesa del ajedrez al aire libre que proporciona la hípica. Y es que, los 40 años del club hípico zornotzarra Kati-Bi serán reconocidos con otro de los galardones. La academia ecuestre ofrece diferentes iniciativas y actividades durante todo el año. “Llevamos cuarenta años fomentando el mundo del caballo y la equitación en Durangaldea. Esta es nuestra forma de vida y nos encanta disfrutarla con el resto”, afirma Ibon Alberdi, jinete y director de Kati-Bi.
El club hípico cuenta con pistas cubiertas y abiertas a alquiler de paddocks, pasando por pupilajes y clases de varias disciplinas ecuestres. Por otro lado, mención especial al campo de cross de cuatro hectáreas y obstáculos hasta nivel de cero estrellas. En este sentido, forman a jinetes y amazonas para que sean capaces de disfrutar de esta disciplina olímpica que agrupa en una misma competición concursos de doma clásica, cross y saltos en pista.
En la actualidad, son 150 los jóvenes que forman la escuela Kati-Bi. “Es bonito ver la trayectoria de los txikis empezando con pottokas en el poni-club y verles después en competiciones estatales e internacionales”, reconoce el zornotzarra.