Mañana se cumplirá, justamente, un año desde que los retratos de Iosu Expósito, Juanma Suárez y Pako Galán dan color, vida, memoria e identidad a la zona de Vallejo en Mamariga. Ese mural fue realizado por el pintor santurtziarra Jon Mao, quien, además del de homenaje a Eskorbuto, ha realizado otros tres murales en la localidad marinera: Bogadores y BogadoresRederas y el que está ubicado en Santa Eulalia y que sirve para indicar el Grupo Serantes y la subida a Bañales. “Los cuatro murales han sido muy especiales para mí, sobre todo, porque era crear en mi pueblo”, reconoce Mao.

El primero de los murales fue Bogadores que decora uno de los laterales del puerto. Tres años más tarde, en 2018, volvió a actuar en el puerto y creó Rederas con la misma técnica, la utilización de cerámica. “En Rederas perfeccioné la técnica que había utilizado en RederasBogadores. Busqué dar más fidelidad a los rostros, crear más detalles y producir interacción entre los personajes”, recuerda Mao. Ese mural se inauguró en el Sardinera Eguna de 2018 e impresionó a muchas de las personas que se dieron cita en esa festividad santurtziarra. “La acogida de todos los murales ha sido muy buena. Al principio me daba un poco de vértigo actuar en una zona tan visible como el puerto por si no quedaba bien el mural o a la gente no le gustaba”, asegura el pintor santurtziarra, quien cuenta de cara al futuro con un par de proyectos artísticos fuera de Santurtzi.

Vistos los resultados de los primeros murales, poco después Mao tuvo una misión un pelín diferente ante sí; dar visibilidad a dos zonas del municipio a través de su obra. Así, en la calle Santa Eulalia dio forma a sendos carteles inspirados en los antiguas paneles cerámicos que indicaban los nombres de las calles para, de esta manera, mostrar a la ciudadanía dónde están el Grupo Serantes y la subida a Bañales. “Fue curioso que, en esta obra, no utilicé cerámica y la gente pensaba que el mural estaba hecho con cerámica, pero no, está dibujado. En los murales del puerto me pasaba al revés, que la gente pensaba que era dibujado. Conseguir esa ilusión tiene mucho encanto”, apunta Mao.

Esos dos carteles fueron la antesala de la que, hasta la fecha, es su última obra en el espacio público de Santurtzi; el mural en homenaje a Eskorbuto. “Para mí era todo un reto porque me debía a un público muy exigente y totalmente diferente al que suelo exponerme”, rememora el pintor santurtziarra. Pero se puso manos a la obra, ideó unos bocetos y volvió a usar la cerámica para llenar de personalidad el muro de Vallejo e inmortalizar allí los rostros de los integrantes de Eskorbuto. El éxito fue rotundo y ese mural es, hoy, uno de los lugares más fotografiados de la localidad. “Cuando me dijeron que había logrado captar y transmitir la mirada pícara de Iosu, me sentí muy satisfecho. Este mural es el que más proyección me ha dado más allá de Santurtzi y me han dicho que hasta allí ha ido gente de países como Colombia solo para hacerse una foto”, explica Mao.

Tres de los cuatro murales que ha hecho en su municipio forman parte de la ruta que los fans de Eskorbuto hacen por Santurtzi para recordar y descubrir los orígenes de la emblemática banda. A través de su talento, Jon Mao ha dejado para la posteridad el espíritu arraunlari, el valor de las mujeres dedicadas al mar y el grupo de música más conocido que ha dado Santurtzi.