- Jolín y Deabru tendrían que llegar mañana a Barakaldo, pero no es el momento para que las dos simpáticas mascotas recalen en la localidad fabril. No es el momento de organizar actos masivos, que generen aglomeraciones y, por ello, Barakaldo decidió suspender sus fiestas hace dos meses. Ahora, el Consistorio pide que no se celebren a lo largo de estos días que, en principio debieran ser tan especiales, eventos sustitutivos a los Karmenak que puedan generar aglomeraciones. “No podemos permitir que situaciones de este tipo se produzcan en nuestra ciudad. La Policía Local y la Ertzaintza estarán vigilantes esos días pero el primer acto de responsabilidad comunitaria debe salir de nosotros y nosotras mismas. Por eso pedimos prudencia, respeto y responsabilidad para evitar aglomeraciones y no poner en peligro a la ciudadanía”, declaró Gorka Zubiaurre, edil de Alcaldía del Consistorio barakaldarra.

En este sentido, desde la institución local se desaconseja acudir a la concentración Barakaldo Jaietan que está convocada para mañana. Una concentración que, tal y como se informó desde el Ayuntamiento de Barakaldo, no ha sido convocada ni por la Comisión de Fiestas ni por la propia institución local, por lo que no se puede garantizar que dicho acto cumpla las medidas de seguridad necesarias en estos tiempos de pandemia, por lo que podría ser un riesgo para la salud pública. “No estamos para hacer experimentos con gaseosa. Brotes como el de Ordizia nos tienen que servir para darnos cuenta del riesgo que esto supone. No sirve de nada haber tomado la decisión de haber suspendido las fiestas, con todo lo que conlleva para la economía de la ciudad, si no se respeta la medida y se programan actos que nos pueden poner en riesgo a todos y todas”, argumentó Zubiaurre. Jolín y Deabru volverán más pronto que tarde, pero este año no es ni su momento, ni el de que se celebren actos que les sustituyan.