- El antiguo edificio del matadero municipal de Muskiz, ubicado a orillas de la carretera que une los barrios de San Juan y el de San Julián de Musques, es un imponente edificio que a lo largo de su historia ha acogido varias iniciativas hosteleras que no han acabado de cuajar. El último intento del Ayuntamiento para arrendar estos locales, que cuentan con su propio aparcamiento, se ha saldado con una falta de licitadores lo que ha abierto las puertas para dotar de un nuevo uso al edificio como txoko de carácter social “que pueda ser utilizado por toda la ciudadanía”, resumió el edil de Cultura, Unai Landaburu. El concejal destacó que el Ayuntamiento ha iniciado las obras de adecuación del local para acomodarlo a su nuevo uso. Paralelamente, el Consistorio está trabajando en la ordenanza municipal para que el antiguo matadero se convierta en un local social para el disfrute público de todos los vecinos.

Desde el Ayuntamiento se recalca que esta decisión se ha tomado para dotar de una espacio público a todos los ciudadanos y ciudadanas “para la celebración de reuniones, cumpleaños, de uso de asociaciones… dando respuesta a las peticiones y sin hacer del espacio algo exclusivo sino abierto para todos”, subrayó Landaburu. El edificio se va a dividir en dos salas, una con cocina en la zona superior y otra sin ella en la zona inferior, además de una zona de juegos que podrán utilizar los niños que acompañen a los usuarios de ambas salas. Algunas de las obras que se han comenzado a realizar son la adecuación a las entradas con varias puertas, además de dotar de todas las herramientas, mobiliario e instrumentos necesarios en un local social. Actualmente, se está trabajando también en el coste que tendrá el alquiler de estos locales, siempre dando prioridad a las personas empadronadas en el municipio. El ayuntamiento prevé realizar una inversión de 60.000 euros en obras y equipamiento.