Trapagaran - A pesar de que el Mountain bike es una especialidad ciclista con apenas tres décadas de práctica por estos lares -por otra parte tierra de grandes corredores de ciclocross que ya sabían lo que era mancharse de barro por circuitos tortuosos-, lo cierto es este deporte cada vez cuenta con más adeptos tanto a nivel de Euskadi y del Estado hasta el punto que son un referente en el circuito internacional. Fruto de su rápida implantación y desarrollo, que hace que cada año 650 deportistas se den cita en la prueba Pedales de Hierro de Trapagaran -la próxima el domingo-, la propia industria de bicicletas ha experimentado una vertiginosa evolución de diseño y materiales para mejorar la práctica de este deporte.

Bien lo saben Jose Crespillo y Joseba Blanco, dos apasionados “veteranos” que, además, desarrollan su actividad profesional ligados al mundo de las dos ruedas y son dos reconocidos restauradores coleccionistas de estas monturas. Ambos se han unido para montar una exposición que se abrirá desde hoy hasta el día 3 de octubre en el Palacio Olaso de Trapagaran, donde se muestra una colección con 22 máquinas de gama media alta que hicieron historia en los años noventa del pasado siglo. “Es una exposición que pretende rendir homenaje tanto a las bicicletas de aquellos años cuando se produjo la explosión de este deporte aquí, unido a unos parajes y un entorno natural de Trapagaran que utilizamos mucho en aquellos años tanto para el Mountain bike como para los descensos”, resumía el trapagarandarra Joseba Blanco, que cuenta con una importante número de bicis “que rodaron por Triano hace 24 o 25 años”.

Piezas de Museo La exposición ofrece, asimismo, el aliciente de acoger modelos que en su momento fueron punteros y que hoy día han desaparecido por el empuje de una industria que ha evolucionado del hierro a la fibra de carbono, pasando por el titanio a velocidad de sprint. “En Trapagaran pueden verse modelos icónicos, algunos de ellas piezas únicas e irrepetibles”, aseguraba Jose Crespillo delegado comercial de una de los señeros fabricantes vascos de bicicletas. En esta exposición -que podría intentar ser itinerante- habrá modelos de la marca francesa Sun, que lideró el panorama mundial en los primeros años noventa, hasta bicicletas de las marcas estadounidenses Kona, Diamond Black o Specialized, con un modelo que ganó el campeonato del mundo.

La presentación de la muestra sirvió también para anunciar el pronto comienzo de un proyecto denominado MB North Classic, que intentará promocionar el mountain bike con todo tipo de actividades y soportes. Como curiosidad en la muestra hay una bicicleta Manitou cuya “fragilidad” la ha convertido en rara avis apta solo para coleccionismo “ya que no se puede usar”, destacó Blanco.