- El Ayuntamiento de Sopela actuará de manera subsidiaria en los desprendimientos de la ladera de la playa de Barinatxe, más conocida como La Salvaje, y para ello destinará 240.000 euros para estabilizar la zona, según informó ayer el Consistorio sopeloztarra. Una partida presupuestaria cuyo objetivo fundamental es asegurar parte de la ladera que se derrumbó el pasado día 6, lo que obligó al Ayuntamiento a cortar parcialmente el acceso a la playa como primera medida preventiva con cintas y vallas para preservar la seguridad de los peatones.

En concreto, durante el derrumbe se desprendieron "elementos de tamaño considerable" que afortunadamente fueron contenidos por la red de alambres y gracias a ello no hubo que lamentar ninguna persona herida.

Tras el suceso, la Policía Local precintó el área afectada, mientras que técnicos municipales de los Ayuntamientos de Sopela y Getxo, así como responsables de control de playas y Cruz Roja, entre otros, se acercaron a la zona de inmediato para evaluar los daños.

De este modo, al constatar el derrumbe parcial y el riesgo de más desprendimientos, el Consistorio sopeloztarra decidió impulsar un estudio para ver qué tipo de medidas de consolidación se pueden acometer en las próximas semanas y, de esta manera, abordar una intervención de mayor calado lo antes posible.

Así, en estas tres semanas se ha realizado un estudio geotécnico de la zona con el firme "compromiso de garantizar la seguridad de los peatones y proteger el arenal", subrayan desde el Ayuntamiento, que acordó destinar 240.000 euros para acometer de manera subsidiaria las correspondientes labores de contención y estabilización de la ladera siniestrada.

A este respecto, según explicaron ayer fuentes municipales, al tratarse de una zona de litoral, la responsabilidad de la reparación de la ladera recae sobre la Dirección General de la Costa y el Mar, dependiente al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Sin embargo, con el objetivo de dotar de mayor celeridad al proceso y garantizar la seguridad en la zona a la mayor brevedad posible, dado que se trata de un arenal muy concurrido y acaba de comenzar la temporada estival, el Ayuntamiento informó recientemente a Costas sobre su predisposición a asumir el coste de las obras de forma subsidiaria y, posteriormente, iniciará los trámites para llevar a cabo el requerimiento de la cuantía de los trabajos ejecutados.

Sobre esta línea, en cuanto al periodo de ejecución de las obras, se estima que los trabajos se prolonguen "cerca tres meses", señalan las mismas fuentes. Mientras tanto, el Consistorio pide a los vecinos y visitantes que accedan al arenal por las escaleras, situadas en primer término, al inicio de la rampa del paseo.

Asimismo, el Ayuntamiento también matiza que "las obras no afectarán a las escuelas de surf que podrán desarrollar su actividad con total normalidad". La Salvaje es conocida por el gran oleaje de sus aguas, lo que la convierten en una playa especialmente atractiva para los surfistas. También cuenta con un edificio multiusos con vestuarios, duchas y donde tienen su sede las escuelas de surf locales.

Por último, se trata de un litoral amplio, de 752 metros de longitud, que cuenta con un sistema dunar propio y una zona naturista. También ofrece la oportunidad de realizar numerosas actividades, entre las que destaca por ejemplo, la práctica del parapente debido a sus espectaculares acantilados que ofrecen unas vistas incomparables.