Getxo - Las Galerías Punta Begoña son una universidad ubicada a pie de playa en uno de los entornos más relevantes a nivel histórico de Bizkaia. Situado frente a la entrada a El Abra, junto al paseo de Ereaga, el complejo arquitectónico ideado por Ricardo Bastida para Horacio Echevarrieta se ha convertido en una facultad y en todo un desafío para los profesionales que trabajan en el proyecto de recuperación y restauración.

Actualmente, varios equipos de alumnos de la UPV/EHU realizan prácticas en las galerías. Los estudiantes, divididos en grupos reducidos, cumplen un periodo de aprendizaje sobre el terreno de dos meses. Con su trabajo académico, colaboran en la recuperación del esplendor de este ilustre complejo arquitectónico.

Precisamente, uno de esos alumnos de prácticas es Juan Bermejo, que actualmente cursa el máster de Gestión del Paisaje, Patrimonio, Territorio y Ciudad. Su primera toma de contacto con las galerías fue en 2017 y ahora acaba de cumplir dos años formando parte del equipo de restauración. “Un día paseando por Ereaga vi un cartel que mostraba el proyecto y pensé: sería genial poder trabajar aquí. Cursé la solicitud y ya llevo dos años”, explica. A pesar de lo laborioso del proceso de restauración, Bermejo destaca los cambios que se han producido. “Cuando miramos las fotos del inicio del proyecto observamos que se ha avanzado mucho”, indica.

Actualmente trabaja a las órdenes de la responsable del equipo de restauración María Dolores Rodríguez Laso. La docente lleva desde 2014 embarcada en este proyecto y desde 2016 es responsable de la restauración de las galerías. “Es un trabajo muy laborioso, pero en el que se aprende mucho y permite la posibilidad de trabajar con una gran cantidad de materiales”, señala. En este sentido, la diversidad de elementos que emplearon Horacio Echevarrieta y Ricardo Bastida durante la construcción de las galerías hace que sea un proyecto muy atractivo para los jóvenes estudiantes. “Entran en contacto con procesos y materiales con los que no tienen la oportunidad de trabajar en la facultad”, subraya Rodríguez.

Así, día tras día, el grupo de estudiantes se afana en las dependencias de la galería sur de limpiar y clasificar las cerámicas que albergan las paredes del complejo. Un titánico proceso de limpieza en seco, clasificación y posterior montaje que se asemeja a las construcción de un gigantesco puzzle. Muchas de estas cerámicas están cubiertas por completo por grafitis producto del abandono que sufrieron las galerías durante años. A simple vista, parece imposible vislumbrar que detrás de esa potente campa de pintura de spray esté una cerámica de origen sevillano de vistosos colores. Sin embargo, Rodríguez y todo su equipo han conseguido restablecer su origen a base de muchas horas de trabajo. “Al principio, pensábamos que solo íbamos a poder llegar a limpiar hasta una determinada fase. No obstante, después observamos que podíamos devolverlas al estado original”, señala la docente. Por este motivo, en varias de las paredes del interior de las galerías han preservado algunas catas señalizadas para que el público pueda ver de un simple vistazo cómo ha evolucionado el proceso de restauración de las cerámicas.

VISITAS GUIADAS Hasta el 14 de julio habrá visitas guiadas gratuitas en las que se explica la historia de las galerías y su entorno. “Estamos muy contentos con la acogida. Al final el arranque ha sido un éxito. Abrimos con las actividades que organizamos dentro de las Jornadas Europeas de Arqueología y tuvimos lleno en ambas -charlas, debate y documental y la excursión-. Nos dio un poco de rabia porque hubo bastante gente que se quedó fuera el día de la excursión con el Arkeologi Museoa por el aforo, pero estamos contentos con el resultado, con las valoraciones del público y con el debate que se generó sobre cómo hay que intervenir en edificios como este con esa carga histórica tan potente. Y, tanto las visitas guiadas, como el ciclo divulgativo van a buen ritmo”, valora María Peraita, arquitecta especializada en restauración y gestión patrimonial.

Por otra parte, el pasado lunes comenzaron las prácticas con el alumnado en la excavación del yacimiento prehistórico situado en el jardín de las galerías y van avanzando a pesar de la “dificultad” que presenta el suelo para su excavación. “Ya han identificado las áreas que presentan mayor interés para excavar y extraer más información. Estas semanas que siguen van a ser realmente atractivas porque se entenderá mejor el proceso al ir avanzando. Y en julio se incrementa el número de alumnos en prácticas, así que estará en plena ebullición”, destaca Peraita. En la excavación trabajan una decena de alumnos aunque puede que “el número se vaya incrementando”. “Hay varios pendientes de valoración porque nos están llegando solicitudes”, concluye Peraita.