El Ayuntamiento de Bilbao contará el año próximo con el presupuesto más alto de su historia: 585,5 millones de euros que permitirán, en palabras del alcalde, Juan Mari Aburto, “poner todos los recursos necesarios a disposición de la ciudadanía y los sectores más afectados por la crisis del covid-19”, sin dejar de lado los servicios públicos, los barrios y los proyectos “con los que queremos seguir marcando nuestro futuro”. Lo hará además sin necesidad de endeudarse, sorprendente en una época en la que la recaudación de las administraciones ha caído con dureza, gracias al uso de sus remanentes de tesorería. “Las cuentas están saneadas y ello nos permite abordar los proyectos y las necesidades del Bilbao de hoy y del Bilbao del futuro”, destacó.

Junto a la concejala de Hacienda, Marta Ajuria, el alcalde de Bilbao presentó ayer el proyecto de presupuestos de la capital vizcaina para el próximo año, que calificó de “realista, riguroso y sostenible”, adaptado a la situación extraordinaria, “una crisis sanitaria, social y económica”, sobrevenida por la pandemia del coronavirus. “Pretendemos poner todos los recursos a disposición de la ciudadanía, de aquellos sectores que resultan más afectados y las personas que son más vulnerables en esta crisis”, avanzó, sin olvidar los servicios públicos y el empleo, los barrios y otros proyectos. “Queremos mejorar nuestro urbanismo, la accesibilidad y la movilidad, especialmente en nuestros barrios”, desgranó el primer edil bilbaino.

Las cuentas se elevarán en 2021 hasta los 585,5 millones de euros, con un crecimiento del 1,6% y 9,2 millones de euros más. “Es un hito. Tenemos el presupuesto más alto en un momento de extraordinaria dificultad”, enfatizó Aburto. Lo logrará, además, sin necesidad de recurrir al endeudamiento. “Las cuentas de Bilbao seguirán estando saneadas al finalizar 2021”. Y es que, la caída de la partida del fondo de financiación Udalkutxa -su principal vía de ingresos- de 348 a 232 millones de euros se compensará mediante el uso de los remanentes. “Bilbao ha hecho los deberes”, en palabras de Aburto. En concreto, se utilizarán 23 de los 110 millones de euros aproximadamente que tiene ahorrados. “Estamos siendo prudentes en el uso de los remanentes. Si la situación fuera de dificultad, seguiríamos haciendo frente a los retos con ese músculo financiero que tenemos por esas cuentas saneadas”, explicó. También se ingresarán otros 7,1 millones de euros adicionales por enajenaciones de inversiones reales, en concreto, el edificio de Colón de Larreategi y un solar para vivienda tasada en Zorrotzaurre.

Respecto al capítulo de gastos, el Ayuntamiento aumentará las inversiones en los barrios -39,5 millones de euros frente a los 37,7 de este año- y crecerá también, pasando de 82,7 a 84,1 millones, la inversión pública municipal, “una cuestión relevante en estos momentos de crisis”. También se incrementarán las partidas destinadas a los servicios públicos hasta los 266 millones de euros, frente a los 261 de 2020. “Mantenemos todos y cada uno de los servicios públicos que presta este ayuntamiento: el alumbrado, las basuras, la ayuda a domicilio, la limpieza...”, enumeró.

Además, el Ayuntamiento trabajará en un nuevo Plan Bilbao Aurrera 2021, para el que quieren contar con las aportaciones y el consenso de todas las fuerzas políticas. “Podríamos tenerlo detallado en este presupuesto pero preferimos trabajarlo juntos, con la oposición, los cinco partidos de este Ayuntamiento, al unísono, para determinar cómo tiene que ser ese plan 2021, para aquellos sectores que van a resultar más afectados -hostelería, comercio, cultura, personas vulnerables...- puedan tener las ayudas que van a necesitar”.

Con la aprobación ayer del proyecto y su presentación en comisión a todos los grupos políticos arranca la tramitación presupuestaria, con la mirada fija en aprobar las cuentas antes de terminar el año. “Nos va a permitir tener un presupuesto en funcionamiento el 1 de enero; ese es nuestro compromiso con la ciudadanía. Tiene que tener la tranquilidad de que este Ayuntamiento está haciendo los deberes para que tengamos este instrumento tan importante para hacer frente a una situación tan complicada”, confió el alcalde.

Al detalle

Proyectos. Entre los proyectos más destacados que Bilbao abordará el próximo año, Aburto citó Auzokide Plana (13,6 millones de euros), los planes de empleo (5,1), las ayudas de emergencia social (4,9), la plaza San Pedro de Deusto (3,8), la recuperación del edificio Beta 2 (3,4), la rehabilitación del edificio de Materias Inflamables en Basurto (2,5), el plan para hacer frente a la pobreza (1,1) y la atención a las personas sin techo (968.440 euros) o la primera fase de la urbanización de María Díaz de Haro (900.000 euros).

Presupuestos participativos. El Ayuntamiento mantendrá los dos millones de euros para proyectos planteados por los ciudadanos a través de los presupuestos participativos. De los 331 presentados se priorizarán once, entre ellos una carpa de circo abierto (con 500.000 euros), un bidegorri en el Puente del Ayuntamiento que enlazará con Campo Volantín (460.000), la renovación del campo de rugby de El Fango (384.500), la mejora de la perrera de Artxanda (200.000), una escultura en homenaje a Jon Pertika (20.000) o la iluminación en el callejón Prim-Iturribide (10.500).